2:00 AM (Sin Salida)

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"Solo hay una ley en los sentimientos, brindar felicidad a aquellos que amas"

Apollandose en las paredes Chisato camino cojeando por los pasillos del desolado edificio, las habitaciones eran variadas pero todas con una característica, o eran un laboratorio o una oficina llena de papeles. Nunca había estado en un lugar así y llegó a preguntarse qué estaba pasando en ese lugar. De hecho, aunque la banda de la dama roja entró, no robaron nada ni siquiera tocaron las puertas y eso lo confirmó cuando se apoyaba en las manijas y estas no se abrían. Algo extraño pero que no le dio vueltas al asunto... Su mente, en cambio, divagaba entre otras cosas lo que le diría a ese chico... Realmente nunca fue buena para mentir y por lo mismo no iba a ocultar la verdad, solo que eso no sería lo primero que iba a decir.

-Soy un asco de ser humano...

Mientras bajaba las escaleras le daba vueltas y vuelta al asunto. Si lo pensaba objetivamente se estaría aprovechando de alguien importante para ella ¿Qué pensarían Mika, Takina, Mizuki y Kurumi de esto? Obvio no estarían de acuerdo, y además le llevaría malas noticias a su ya de por sí complicada vida. Joder Chisato nunca haría eso, nunca le causaría daño a otros para salir ganando, menos si es alguien a quién ella aprecia. Y todavía peor es la razón por la que acude a él. En un momento dejo de caminar.

-No puedo hacerlo, esta no soy yo.

Se llevó las manos a la cabeza mientras cae, ya que sus piernas estaban tan débiles que no podían soportar el peso de su cuerpo. Dejó que su cabello ocultaba su cara y su rostro se sonrojo de la vergüenza que sentía de sus propias acciones.

-Perdóname Takina, cómo pude tan siquiera pensar en hacerte eso...

-¿Y eso qué?

Una voz le llamó. Rápidamente se dio la vuelta y se encontró con que no había nada. ¿Se estaba volviendo loca? Bueno... Más de lo de ya estaba.

-¿Dónde estás?

No obtuvo respuestas... Y ahí fue cuando se dio cuenta de un olor extraño en el ambiente. Olía a gas, esto le preocupó bastante sabía por experiencia que eso podría significar un incendio y realmente no está en condiciones para correr, así que trató de acelerar el paso, ignorando el inmenso dolor en todo su cuerpo.

Y unos segundos estaba al frente de una puerta de metal cerrada. Tomó la manija y se dio cuenta que estaba a una temperatura muy baja, tanto que al girar pudo escuchar como trozos de hielo se rompían. Lentamente abrió, entró y para su desgracia la puerta se cerró detrás suyo dejándola en una especie de laboratorio enorme cubierto de suelo a techo por hielo y no había ventana que dejará pasar el sol. Al suspirar el aire salio en un aliento congelado qué era visible.

El silencio era profundo sus pisadas formaban el único sonido el ese lugar a pesar de pisar muy suavemente. Tuvo que ingenierarselas para caminar solo con sus pies puesto que las paredes estaban cubiertas totalmente por hielo. De repente sintió un intenso olor a sangre, algo asqueroso como si esta pudiera pudrirse. Era asqueroso.

-¿Qué clase de experimentos hacían aquí?

Recorrió el largo pasillo sintiéndose vulnerable, desprotegida. No escuchaba ni un solo sonido. Siguió adelante y llego a unas escaleras qué daba hacia abajo, realmente no tenía idea de adonde estaba llendo así que solo bajo lentamente. Una fuerte brisa golpeó el rostro de Chisato haciendo que su cuerpo y dientes temblaran, aumentaba el frío cada vez que bajaba pero no era uno normal, sino artificial, al parecer todo esto era gracias a algún sistema de ventilación, muy probablemente de congelamiento. La iluminación comenzó a dar problemas pero algunas luces (o intento de luces) iluminan a medias, un lugar en pocas palabras incomodo. Eso sí, cada vez más tomaba el aspecto de una prisión.

Lycoris Recoil: La Noche De La Expiación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora