ᴀᴍᴏʀ ꜰɪᴄᴛɪᴄɪᴏ, ᴄᴀʀᴛᴀꜱ ʀᴇᴀʟᴇꜱ // ＨＹＵＮＬＩＸ

12

En el primer día del nuevo año, Felix decidió comenzar arreglando su habitación, una tarea que dejó perplejo a su padre y hermanas, quienes lo veían con curiosidad mientras organizaba sus cosas.

Una noche, el padre de Felix le propuso ir a la cafetería que tanto les gustaba para hablar un poco. En ese ambiente familiar, el padre no pudo evitar recordar a la madre, ya fallecida, y algunas historias que vivieron juntos en ese lugar. Felix escuchaba en silencio mientras algunas lágrimas escapaban de los ojos de su padre.

—Recuerdo cuando tu madre y yo veníamos aquí, solíamos pasar horas conversando y riendo. La echamos de menos, ¿verdad, hijo? —dijo su padre con voz entrecortada por la emoción.

Felix asintió, sintiendo un nudo en la garganta.

—Sí, mucho.

—Y luego está Hyunjin... —continuó su padre, cambiando el tono de la conversación.

Felix se tensó, esperando que el tema no siguiera por ese camino.

—No hablemos de Hyunjin, por favor —respondió Felix, tratando de desviar el tema.

—¿Qué Hyunjin? —preguntó su padre, con una expresión de confusión genuina.

—¿En serio, papá? —replicó Felix, sorprendido por lo sarcástico que podia llegar a ser su padre.

—Mira, Felix, no sé lo que te haya pasado con él, pero cuando estás con él, hijo, te veo tan feliz, tan lleno de vida. Me recuerdas a tu madre en esos momentos. No ocultes esa parte de ti, Felix. Es hermosa y valiosa, al igual que lo era ella —añadió su padre con sinceridad, con una mirada llena de amor y comprensión.

Las palabras de su padre resonaron en el corazón de Felix, haciendo que las lágrimas comenzaran a brotar de sus ojos.

—Lo intentaré, papá —dijo Felix con voz entrecortada por la emoción, mientras se aferraba a la mano de su padre.

Ambos se quedaron en silencio por un momento, compartiendo un momento de conexión y amor entre padre e hijo, antes de continuar con su conversación en la cálida atmósfera de la cafetería.

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Después de las vacaciones de Navidad, Felix finalmente regresó al instituto. Mientras caminaba por los pasillos, lo acompañaban sus amigas Lia y Sana. La energía del primer día de clases del nuevo año se sentía en el aire, y las conversaciones y risas resonaban a su alrededor, creando un ambiente de entusiasmo y expectativa.

—Pues yo no he vuelto a oír nada del asunto —dijo Sana, refiriéndose al video de Felix y Hyunjin que se había filtrado.

Lia asintió.

—El escándalo del grupo de debate le ha arrebatado el primer puesto —afirmó la castaña.

—Vale, es una buena noticia. Oficialmente vuelvo a ser invisible —sonrió orgulloso el pecoso.

A medida que avanzaban, llegaron hasta sus taquillas, donde pudieron ver a un montón de gente rodeando especialmente la taquilla de Felix. Él se acercó empujando a todos y, cuando pudo darse cuenta, vio que en su taquilla había una foto del video de él y Hyunjin. Además, en la taquilla habían escrito algunas palabras hirientes con un marcador permanente.

Lia se acercó rápidamente y arrancó la foto de la taquilla. Felix, sintiéndose abrumado y furioso, salió de ahí empujando a todos. Mientras huía por el pasillo, se cruzó con Hyunjin.

—¿Qué pasa? —le preguntó Hyunjin, notando su agitación.

—¿No has dicho la verdad? ¿Has dejado que todo el mundo crea que hubo sexo donde no lo hubo? Apuesto a que te moló que subieran el video —respondió Felix con rabia, antes de seguir su camino.