1er Remate

276 18 2
                                    

◉ Remate: Ante la situación a favor de (A/B) termina ganando el contrario (B/A) por movimiento inesperado.

Ova ¡Lev Haiba ya está aquí!

¿Cita?

Tetsurō había encontrado a Kenma camino al gimnasio de la escuela.

Aunque sería mal dicho decir que "lo encontró", al azabache su alarma no lo despertó, y visto la hora, sabía que había dejado plantado a su pequeño amigo, que seguro estuvo tocando su timbre un largo rato.

Grito su nombre para que lo esperara, pero claro que lo ignoró, y no se le hizo raro.

Sabía el infierno que le costaba al teñido levantarse temprano los domingos.

Pero bueno, no era la primera vez, así que decidió hacer como si nada, de todas formas, Kenma conocía que su casa podía ser muy ruidosa, a tal punto de formarle ese mal hábito para dormir, con ambas almohadas alrededor de su cabeza.

—Perdimos las preliminares del intercolegial. —resalto —Las del torneo de primavera están al llegar.

—Tú nunca te cansas del voleibol, Kuro. —contesto el menor, aún perdido en su consola.

Su observación lo despertó del objetivo en su cabeza como todo buen capitán, y sin darse cuenta, procedió a verlo con ternura.

—Bueno...—a voz juguetona, lo empujó con su hombro —...nunca de las cosas que me gustan.

La incercia hizo mover el brazo de Kozume, haciendole presionar la tecla equivocada, dándole un golpe crítico a su personaje.

Dio mueca de disgusto, al ver un GAME OVER en lo amplio de su pantalla.

—Ey. —fruncio su entrecejo.

—Vamos... —sobrado se adelantó, guiñándole solo por molestar —De todas formas no ibas a ganar.

Kenma apretó su consola.

Sin decir una palabra, cambio de dirección, adentrándose al callejón.

—¿Ah? ¿Kenma? —voltio repentino, siguiéndolo —¡Espera, solo bromeaba..!

En un abrir y cerrar de ojos, lo había perdido.

A Tetsurō lo invadió el asombro, el chico era demasiado lento, y no se lo imaginaba corriendo, aunque...

—¡Llegaremos tarde! —dió vuelta, sonando cada vez más alterado —¡Ken, no me asus...-

—¿Sabes? —oyó al menor.

Kuroo giro abrupto al localizar su voz, siendo seguida de un chirrido desastroso.

Al levantar la mirada, noto que se trataba de las escaleras de emergencias plegables que estaban siendo recogidas por él, dejandolo así, a unos cinco metros de altura.

—Yo tampoco me canso de lo que me gusta. —termino, sacando su consola con mueca victoriosa.

El lider respingo ante su determinación, obligándolo a abrir un poco más sus rasgados ojos.

—¿Cómo es que te...? ¿Sabes qué? No importa. —exclamo tenso, tratando de conservar la compostura  —Baja, ya estamos lo bastante atrasados.

—Tú lo estás. —aclaro, sentándose cómodamente entre el rejado, volviendo a iniciar partida —Yo llegaré con mi tiempo justo.

—¡¿Qué?!

—Echaste a perder mi partida... pero estaba cronometrada para gastar 13 minutos con 28 segundos, almenos hasta llegar al gimnasio. Ni un minuto más, ni uno menos.

Entre || Entretiempos ●◍ (Kuroken) ●◍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora