¿De verdad Lo estás? Parte5.

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2 de mayo, jueves
💙🧡💙🧡💙

-Bueno. Es hora de despertar que ya vine con la comida. Koooong...

Me quejé al seguir escuchando su insistencia. Abrí los ojos y me levanté con irritación. Volteé hacia él para hacerle mala cara.

-No me hagas esa cara, sabes que necesitas comer.

-¿Y eso qué? Ayer comí dos veces y todo fue por ti. Si por mí hubiese sido solo hubiera tomado agua.

Contesté irritado. Godzilla desde ayer ha estado cuidándome, dándome de comer y ayudándome con algunas cosas.

-Lo sé perfectamente. Tú ni siquiera hubieras tomado un vaso de agua.

Giré los ojos.

-Pero al menos un gracias, ¿no? Necesito que estés bien, no me gusta verte así de mal. Ayer que te levantaste estabas con una fiebre que, en verdad me preocupé.

Tenía razón... él estaba haciendo mucho y yo aquí quejándome. No creí que él iba a estarme cuidando, pensé más bien que me iba a dejar a mi suerte porque no quiere a su hijo pero no, todo lo contrario, él me ha estado alimentando y cuidando.

Sonreí con un poco de vergüenza a él, quien me estaba viendo mientras estaba preparando algunas frutas.

-Perdóname mi amor. Tienes razón... gracias. Te agradezco que ayer por la mañana me ayudaras a quitar el dolor de cabeza con ese tierno masaje, también te agradezco por darme de comer dos veces aunque tuviera un asco terrible.

Él me sonrió.

-Y también por no darme besitos.

Confesé, haciendo un puchero. Eso es lo único que faltó, también una que otra mano por allá, tocando mi cuerpo. Goji bajó al suelo y se acercó a mí con un plato lleno de frutas picadas. Sonreí al ver los trozos de manzana, banana y alguna que otra uva.

-Estás sensible. Creí que no ibas a querer nada de eso.

Tomé el plato con las frutas y negué suavemente. Bajé mis ojos a la comida y elegí una uva verde, metiéndomela a la boca con un poco de asco. Gracias al cielo hoy no tenía tanto dolor de cabeza y espalda, solamente asco, algunas náuseas y dolor en mis pechos. Ese no se iba por supuesto.

-¿Cómo no voy a querer un beso?

Goji sonrió y se acercó a mí al ver mis labios esperando los suyos. Tomó mi mentón y dio un profundo y rico beso en mi boca, haciéndome sonreír en sus labios mientras suspiraba y masticaba la uva. Reí bajamente al sentir sus dientes estirar mi labio inferior, separándose con una sonrisa.

-Me aparté rápido para no llegar a más.

Me confesó guiñándome el ojo. Reí de nuevo ante esa confesión tan íntima.

-... ¿Cómo amaneciste? Bueno, como atardeciste.

Le pegué en el brazo por eso mientras lo miraba indignado.

-Sabes que duermo mucho por él o ella.

Le respondí a su sarcástica pregunta. Al decir eso de mi bebé él no dijo nada, solo ignoró un poco mi respuesta.

-¿Y los malestares qué tal?

Agarré un pedazo de manzana y con dificultad una vez más me la metí a la boca, masticando. El asco era grande, pero por mi bebé estaba comiendo, ya que Godzilla en algo tenía razón:debía comer para estar bien y nutrido, por supuesto. Claramente no lo dijo por mi bebé, pero igual nos beneficiaba.

-Ando mucho asco.

Le respondí con cara de querer expulsar la manzana que tragué.

-¿Y... tus pechos te duelen mucho todavía?

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