La tristeza es mi sangre
Y a su vera, mi vena
Donde mora la pena
Donde muere el hambre
Hambre y melancolia
De que la luna este llena
De amorios y de alegrias
Soy el principe de la dulce pena
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Fragmento del poema de "el...
La suave voz de Odette me saco de mis pensamientos.
Odette- Te perdiste en la nada por unos segundos-
Escuche lo dicho por Odette, cuando las mire ambas me analizaba con la mirada, aun no sabia como dirijirme a Odette despues de lo ocurrido, me sentia apenado y culpable por lo que hice, respire ondo antes de hablar.
-Odette, realmente siento lo que te hice, en verdad lo siento mucho nunca quise lastimarte-
Su mirada paso de sorpresa a una mas tranquila y dulce, desviandola evitando el contacto visual.
Odette- En ese momento, lo admito si me asustaste, pero hay que entender que no eras consiente de tus actos, aso que tranquilo estoy bien-
Una debil sonrisa se dibujo en mi rostro al escuchar las palabras de Odette, regrese a la realidad cuando escuche como madam Carmilla tosia con sutilesa, habia olvidado que ella tambien estaba en la habitacion.
Madam Camilla- Bien, ahora que sabemos como evitar que te debilites, en tus comidas añadiras un vaso de sangre por lo menos-
La idea de consumir sangre aun no la digeria, pero bueno no era como si estuviera a discucion.
Con el pasar de los dias me sentia cada vez mejor y con ello las pesadillas habian disminuido.
Nos encontrabamos en la oficina de madam Carmilla, dentro tambien se encontraba un overlord, el cual desprendia una presencia siniestra, si mal no recordaba madam Carmilla lo presento como Zestial.
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(Credistos a su autor)
Lord Zestial- Me siento complacido de conocerte finalmente, nuestro primer encuentro no fue el mas adecuado-
Clara me habia contado que el me habia detenido y noqueado durante el insidente.
-El placer es mio al conocerlo lord Zestial-
Realice una ligera reverencia, aun que no lo puder ver se que madam Carmilla estaba comacida de mis modales.
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