Flechazo por equivocación Y El Flechazo que si dolió libro 1 Y 2

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—¡vamos pringaos!
—¡E despertar!
—Cállate James — dijo Silvia tirada en el suelo al lado Michael
—Son las 4 de la tarde joder ¡Venga!—le di unas patadas a Michael causando que Silvia me tiraste su móvil haciéndome reír — ¡Vamos hay un mundo ahí fuera que nos espera, despertad!— levante las mantas que cubrían a Marcus en la cama, ayer nos dormimos bastante tarde jugando videojuegos y hablando
—Déjalo ya James no tenemos nada que hacer hoy—susurro adormilado
—¡Estar conmigo!— exclamé

Después de un largo tiempo conseguí levantarles y Silvia se metió a la ducha mientras nosotros desayunábamos, yo me preparé unos cereales e Isabela hizo tortitas para los demás, como siempre no acepte

—¿James qué haremos hoy?— pregunto Michel
—¡Chicos!- exclamó Anto sin dejarme hablar
—¡Anto!— exclamaron los dos cogiéndole en sus sillas—¡Pero bueno cuánto has crecido en dos meses!
—¡Aque sí, mirad!— Anto saco sus "músculos"
—Wow— exclamaron los dos siguéndole el royo
—Ayer no os vi ¿Dónde estabais?
—Estuvimos todo el día fuera y luego en el cuarto de James toda la noche — dijo Marcus
—Oh, yo estuve todo el día en casa pero me dormí pronto
—¿Es fin de semana porque te duermes pronto?— preguntó Michael
—Para aprovechar el día ¿Qué hora es? Me toca estudiar

Cuando fui a mirar la hora me di cuenta de que no tenía mi móvil,
Mierda, estará en el cuarto

—Ahora vuelvo— dije bajando las escaleras del sótano
Abrí la puerta con cuidado para no encontrarme a Silvia saliendo de la ducha o algo
—¡Silvia entro a por mi móvil! ¿vale?
—¡No te preocupes tengo la ropa aquí— exclamó desde el baño
—¡Está bien!— respondí
Me aproxime a mi mesita, donde deje mi móvil cargando, una vez lo agarre me dispuse a marcharme pero...al lado de mi móvil estaba el de Silvia que se encendió con una notificación

No lo sé Silvia, quizás solo sea eso para él, un simple reto

—¿James?— pregunto Silvia detrás de mí
—Silvia ¿me explicas por qué tienes el número de Amalia? — me giré para encararla
—Es mi amiga— me arrebato el teléfono — me cayó bien ¿qué pasa?
—¿¡Que que pasa!? ¿Se lo has contado?
—¡¿El que?!
—¡Lo de la apuesta Silvia joder!
—¡Claro que no!
—¡Entonces de que está hablando ella!— señale su móvil, ella lo encendió y vio la notificación
—Mira...— dijo calmada, todo lo contrario a mí —si hemos hablado de eso ¡Pero te prometo que no le he dicho nada de la apuesta, al revés le he dicho que eres buen chico y que te dé una oportunidad!
—¿Por qué ibas a hacer eso sabiendo que la voy a engañar?
—Porque creo que no lo aras...al final os haréis amigos y...
—Silvia no, no voy a enamorarme mágicamente ni me caerá bien mágicamente ¿Vale? Ahora, te gradecería que no hablases con ella, para no causarte mal estar
—James Amalia me cae bien, te prometo que no le diré nada, por lo menos...—se dio la vuelta para subir arriba—, ya que vas a hacer esto...vuelve pronto a Australia, no tardes mucho

...

—¡Vale vale parad!— exclamé cuando sentí que me ahogaba por la cantidad de agua que me salpicaban, estábamos en mi jardín trasero ¡Tenía piscina! Le he hecho tan poco caso a esta casa que ni siquiera me fijé en que tenía piscina ¡Silvia fue la que se dio cuenta
—¡E James te llama un tal cabezón al móvil!—exclamó Marcus sentado en las hamacas
—voy—exclamé saliendo de la
piscina —¿Dime cabezón?
—Me
—¿Qué?
—Has dicho que diga Me
Supiere —¿Qué necesitas cabezón?
—¿De verdad se llama cabezón?— pregunto Marcus
—¿Eh, quien ha hablado? ¿James tienes más amigos?
—Luego te explico lo de su nombre y si cabezón tengo más amigos aparte de vosotros, son mis amigos de Australia
—¡Oh genial diles que vengan!
—¿Dónde?—pregunté
—Hay fiesta en casa de Nica
—Mm...¿Nica eh?— pregunté
—Si, ¿Entonces venís?
—Si claro
—¡Está bien genial nos vemos!
Colgué el teléfono y miré a los chicos
—¿Queréis ir a una fiesta?