Me despierto con mucho calor y sofocada. Me levanto y me doy una ducha rápida. Me pongo la ropa interior y una camiseta sencilla color naranja con unos vaqueros pitillo. Me miro al espejo. Estoy hecha un cuadro y mi cara es espantosa.
En el piso de abajo mi madre está calentándose su café, pero mi padre no está. Mi madre me sigue con la mirada mientras bajo.
Yo:
¿Y papá? - La pregunto mientras cojo una taza para mi y la lleno de leche.
Ella me mira, con sus ojos tiernos y una mirada reconfortante. Siempre está feliz.
Mamá:
Está en el trabajo. Ya volverá -Me dice ella, lo más tranquila posible.
Suspiro y me siento en la mesa de la cocina con mi taza. Bebo a grandes sorbos.
Mamá:
¿Cómo te encuentras? ¿Estás mejor?-Me pregunta mientras coloca algunos vasos que estaban en la pila.
Yo:
Bien, mucho mejor. -La respondo. No sé que día es ni en que mundo estoy. Ya no sé nada.
Yo:
¿Qué día es hoy? Quiero quedar con Laura.-La pregunto.
Me gustaría quedar con ella, para contarla todo con Daniel.
Y también quiero hablar con él.
Mamá:
Hoy es Viernes.-me dice ella, sorprendiendome ya que estaba embobada en mis pensamientos.-Llámala y queda con ella si te encuentras mejor.
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Los ojos azules de Laura se clavan en mí.
Laura:
Pero mírate.-me dice y apoya sus manos en cada hombro mío.-Estás hecha una mierda desde que no estás con él. Queda con él y hablarlo. -Me dice y me sonríe con sus labios juntados.
Yo:
Me ha dado unas flores y una carta.-Musito.
Laura:
Qué dices. ¿Ya te la ha dado?-Frunzo el ceño.-Fue idea mía.-Me aclara.-Pero la carta ha sido cosa suya.
La sonrío.
Laura:
Llámale. -Espeta.
Yo:
¿Ahora? -la pregunto.
Laura:
Ahora.
Yo:
Vale, pero no digas nada, ni respires.-Digo cogiendo mi teléfono y marcando su número. Son las seis. Supongo que lo cogerá.
Ella asiente.
Al tercer pitido lo coge.
Daniel:
Hola.-Suspira y puedo sentir como sonríe al otro lado de la línea.
Yo:
Hola.-Sonrío yo también.
Laura me mira impaciente. Seguro que quiere que le diga un montón de cursiladas.
Daniel:
¿Cómo te sientes?-me pregunta con voz suave.
Yo:
Mejor. Oye...He leido la carta, y he visto las flores, son preciosas.-Digo y observo las flores que decoran mi habitación.
Daniel:
¿Ambas cosas son preciosas?
Yo:
Sí, ambas cosas.-Digo y sonrío.
Laura me da varios toquecitos en el brazo porque quiere que lo ponga en altavoz, y asi lo hago.-Me lo he pensado mejor, y te perdono. Daniel, no puedo estar sin tí. La cagarás, y yo también, pero sé que nos queremos mutuamente. Te quiero, Daniel.-Susurro, y a la última frase se me quiebra la voz.
Daniel:
Pues claro, nena. Yo también te quiero.-Susurra.
Laura se tapa la boca con las manos emocionada. Cuelgo, y nada más hacerlo Laura chilla de la emoción.
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Aquí tenéis otro capítulo.
A partir del capítulo siguiente empezaré a escribir con guiones, ósea sin poner "Daniel:". Lo siento, pero me resulta más cómodo y tardo menos tiempo.
No olvidéis de poner voto y comentario, y SI TENÉIS DUDA DE LA HISTORIA, O CRITICAS (BUENAS) O SUGERENCIAS PARA LA HISTORIA, PODÉIS HABLAR CON MIGO POR MENSAJES O POR COMENTARIOS.
Me estoy pensando en hacer un grupo en Whatsapp pero aún tengo pocos lectores. Pronto, subiré el siguiente capítulo. ¡Muchos besos!
