Perfect Incident ✦ kooktae.

Cinco.

Taehyung no habló más en ese día, su mirada era perdida y no quería hablar o estar acompañado por uno de sus amigos, ya eran las 5 de la tarde, cerraban a las 8 los jueves, como ese día.

Su mamá le había mandado mensajes donde decía que tiene que encontrarse más con Namjoon, conocerlo y cuando lo conozca sabrá que su madre tenía razón.

Se supone de Namjoon lo iría a visitar algo a menudo para que se conozcan mejor, eso respondía a la pregunta de porque aquel alfa estaba en esa tienda.

Bueno, estaba afuera, tampoco es como si Namjoon quisiera casarse, pero tampoco podía desobedecer las palabras y órdenes de sus padres.

—Buenas tardes —arreglando su ropa entró a la tienda, Taehyung seguía con la mirada perdida, no estaba poniéndole atención a nada.

—Nam- —Jin paró sus palabras— Buenas tardes —y siguió con su trabajo esperando que nadie haya escuchado lo primero.

—Buenas tardes —Jimin y Yoongi saludaron igualmente, todos sabían quién era el, era un alfa muy adinerado, guapo y con mucho tiempo libre al parecer.

Jungkook no saludó, algo no le agradaba del todo.

—¿Kim Taehyung está aquí? —habló arreglando su cabello.

-S-si... lo iré a buscar —Jin estaba por entrar al área de empleados para buscar a Taehyung, pero Yoongi lo agarró delicadamente del brazo deteniéndolo.

—No te preocupes, yo lo hago —y con una sonrisa se dirigió a donde se supone que estaba su, ahora, prometido.

Abrió la puerta viendo a Taehyung sentado en un acolchonado sillón sin si quiera prestarle atención.

—Taehyung... —no sabía que hacer, de niños eran buenos amigos, pero con el pasar de los años, sus padres los empezaron a alejar y ahora querían que se casaran.

—Oh.. Namjoon —se paró arreglando su cabello.

—Bueno... ¿Está todo bien TaeTae? —y como si volvieran a ser cercanos como cuando eran niños utilizó aquel apodo con el que se trataban cuando eran niños.

Taehyung sonrió recordando aquellos momentos.

—¿Tú tampoco quieres hacerlo no? —se sentó a su lado.

—Nam... ¿acaso tenemos otra opción? —lo apodó de igual manera, volviendo a cuando eran niños.

—Supongo que no —suspiró sacando una cajita de su bolsillo— mamá me dijo que te de esto y que ambos, desde ahora, tenemos que utilizarlo, al menos hasta que nos casemos...

Taehyung vio aquellos anillos, eran bonitos, pero no se sentía nada especial al colocárselo.

—Creo que sería bien conocernos un poco más ¿no crees? osea si nos conocemos, pero no creo que sigas pensando como cuando tenías 8 años.

—Hey, Bob el constructor sigue siendo una buena serie —eso hizo reír un poco a ambos.

—¿Quieres ir a pasear? Tienes un sub gerente, no creo que esto se descontrole ¿o si?

—Claro, vamos —su mirada seguía triste, pero al menos sería su amigo cuando se casen, debían de conocerse al menos un poco.

Salieron de la habitación ya con los anillos puestos, Jin los siguió con la mirada, una mirada triste y resignada.

—Jungkook, cierra la tienda por favor —le entregó las llaves.

—Claro que si —no entendía lo que pasaba, pero sabía que no era bueno, porque su omega no estaba sonriendo.

Ya había estado trabajando al rededor de dos semanas en esa tienda, casi dos semanas donde no faltó día donde Jungkook le regalara una flor a Taehyung o que le diera un besito en su frente o cabellera, aún no se atrevía a invitarlo a salir, pero estaba planeando hacerlo.

Se habían vuelto un poco mas cercanos en esos 11 días, lo suficiente para que Jungkook lo acompañe a su casa casi todas las noches, lo suficiente para haberlo invitado a cenar, había sido algo caro, pero a Jungkook no le importó.

Quería pedirle una cita, añoraba hacerlo, pero en ese momento su omega no estaba del todo bien.

Pronto sabría cómo poder mejorar el humor de su omega y volver a poner una sonrisa en su rostro.

Lo que Jungkook no sabía es que Taehyung ya estaba comprometido.

Así que probablemente, se rompan el corazón mutuamente.