05.- Belcheri

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—Zero– grito Yuuki desde el otro extremo del patio en busca del peliplata que tenía más de dos horas sin aparecer

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—Zero– grito Yuuki desde el otro extremo del patio en busca del peliplata que tenía más de dos horas sin aparecer.





Yuuki desde luego sabía que sus gritos eran en vano, el chico estaba con esa yegua que la odiaba. Suspiro y golpeo la punta de su zapato con el pavimento, estaba dando largas a su deseo de ir a buscarlo a los establos, realmente le aterraba Lilly, no entendía como era que Kiryuu podía estar durmiendo a su lado tan quitado de la pena.





Tomo una profunda exhalación y se encaminó, pero pudo ver al rubio profesor que hablaba con el otro profesor que para el mismo caso también le asustaba, era tan serio y tan pálido que le recordó a esos vampiros de las leyendas, nada que ver con la belleza de Kaname y los de la clase nocturna. También había evitado a Kaname desde que los nuevos profesores llegaron. Quería mucho a Kaname, pero no lo veía de esa manera, ella quería al profesor Malfoy, él era tan diferente, tan atractivo y misterioso, no es que Kaname no lo sea desde luego que lo era, pero esa obsesión que tenía con mantenerla a salvo le daba cierto repelús. No era para nada normal.





Además, Zero jamás se lo perdonaría y ella amaba a Zero a Ichiru y Kaito. Nunca haría nada que los lastimara, aunque Zero a veces era algo malo, pero aun así era su amigo.





Cuando se acercó a los profesores de manera lenta dando tiempo de que el profesor Snape se marchara alcanzo a escuchar un poco de su conversación.





—... déjalo estar Severus, ya te dije que no tengo esos síntomas y no estoy interesado en descubrir nada, estoy bastante bien sin saber de esas cursilerías estúpidas de Hufflepuff...





—Si estuvieras bien ya hubieras superado lo de Potter y no te veo la más mínima intención de salir de eso.





—Mi vida no gira en torno a Potter y ya no quiero hablar de eso.





Draco resopló y en ese momento se dio cuenta de que Yuuki rondaba por allí así que cambio su expresión por una menos tensa.





—¿Ocurre algo, señorita Cross?





—No profesor solo estoy buscando a Zero...





—¿Zero?-- todas las alarmas de Draco se dispararon y cosa que nunca habría ocurrido dejo a Severus y fue al lado de Yuuki. —¿Le ha ocurrido algo? ¿Desde que hora no lo ves?





—Me alegro tanto de que no te importe lo que ocurra con ese muchacho, Dragón. De lo contrario tu magia ya hubiera echado abajo los muros de la Academia.– siseo Severus tan bajo que solo el rubio lo escucho.





—Zero siempre hace eso de desaparecer, es solo que el Director lo está buscando y...





—Te ayudaré a buscarlo, ¿dónde crees que pueda estar?





—Lo más seguro es que esté con Lilly...





Yuuki se giró al oír estallar la fuente en el centro del patio principal, estaba muy asustada, ya que no había un motivo lógico por el cual la fuente explotara de la nada.





—Tienes que tranquilizarte, Draco.– Severus irrumpió en la mente de menor y le hablo, era su magia la que se estaba desbordando y eso no era bueno. —Concéntrate en tu magia ella te llevará al chico.– le dijo por último mentalmente antes de dirigirse a Yuuki.  —Vamos a ver que ha ocurrido con la fuente señorita Cross.





Draco se concentró en su magia y de inmediato lo sintió se marchó antes de que aquello se llenara de estudiantes curiosos y de los cazadores.





En aquel momento Draco podía sentir claramente como su magia lo arrastraba hacia la parte trasera de la Academia Cross, era como un imán que lo dirigía al metal en este caso a Zero Kiryuu, por un lado, eso le asustaba bastante, ya que si el chico se hallaba con esa muchacha, Lilly... su magia podía tornarse agresiva y entonces no sabía como demonios iba a explicarle al chico de cabello plata que lo tratara como algo de su propiedad.





Un establo es el lugar al que había llegado, los relinchos y los golpes de los cascos de aquella yegua se lo dejaban más que claro.





—Hola bonita– dijo con voz suave para tranquilizar al animal. —Al menos no tienes alas.-- le susurro mientras se acercaba a ella convocando un par de manzanas.





Lilly lo dejo acercarse, con suavidad le acaricio la crin y el animal se dejó hacer. Fue cuando por fin lo vio, entre el heno del cubículo de la yegua.





Era sin duda la criatura más hermosa que él, aunque provenía del mundo mágico hubiera visto jamás. Era verdad, todo lo que el maldito libro decía, había algo que lo arrastraba hacia Zero Kiryuu estaba listo para aceptarlo, aunque no tenía idea del que diablos cambiaba eso.





No podía acercarse a él aunque quisiera, tendría que explicarle que y quien era y aun así dependía de lo que ese muchacho quisiera, antes que nada no iba a obligarlo y él… él era un mortífago.





Apretó los puños, Zero sería atacado en el mundo mágico por estar con él no quería exponerlo a eso. Ser un marginado, pareja de una escoria de su mundo. Se giró para irse.





—Espera.





Malfoy sé paralizó. Esa voz era ronca pero suave, dulce pero fría. Un golpe disfrazado de caricia. En un segundo Zero estaba frente a él.





—Te busca el director.– trató de salirse por la tangente.





Zero lo miró penetrantemente.





—¿Sabes lo que pasa? ¿Por qué tengo esta…?– apartó la mirada.





Zero también sentía la necesidad de estar juntos de conformarse y unirse.





—Es mejor que lo ignores.– susurró Draco acariciando su mejilla con lentitud.





—Una mierda.





Draco abrió los ojos, asombrado por esa boca tan sucia. Bueno él era un Sangre Pura, no iba por allí diciendo esas cosas.





—No voy a ignorarlo y si no me lo dices tú lo voy a averiguar. Y después de eso deberás darme explicaciones.





—Tu vida será más fácil si…





—Mi vida nunca ha sido fácil. ¿Qué te hace pensar que quiero que lo sea? Soy un jodido cazador. Mi vida nunca va a ser fácil. Así que habla.





—Soy un...





Un ruido los distrajo, Zero se apartó y Draco conjuro un protego silencioso sobre el peliplata. Algo a parte de ellos estaba en ese lugar.

La Opción de la Serpiente.©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora