Poemas de un corazón no correspondido

Secreto

Trato, te juro que lo intento, pero cada día es más difícil ocultar lo que siento.

Y es que me gustas tanto que se ha vuelto un poco difícil disimularlo.

Realmente no sé desde cuando, pero me gustas tanto que ya me cuesta ocultarlo.

Me gusta tu voz, me gustan tus chistes, pero me gusta más tu risa escandalosa al terminarlos.

Me gusta tu sonrisa e inclusive me gusta esa tonta camisa a rayas que te pones de vez en cuando.

Me gustas y no te imaginas cuanto.

Me gustan tus ojos, aunque no pueda ni siquiera mirarlos.

Tus ojos, esos lindos ojos que me ponen nerviosa con tan solo notarlos, siendo sincera, tu mera presencia basta para alterarme y no te imaginas cuanto.

Me gusta cuando esperas mi respuesta, esa mirada que se combina con una sonrisa hacen que el tiempo se detenga y mi risa sea tu única respuesta.

Me gusta tu cercanía, me llena de calma rozar tu piel con la mía.

Trato, te juro que lo intento, pero es que cada día que paso en tu compañía hace de este secreto una agonía.