De nuevo me causas insomnio.
Y es que no puedo cerrar los ojos sin que en ellos aparezca tu rostro.
Tu risa resuena en mi corazón y lo hace correr hasta más no poder.
Mi memoria recuerda tu sonrisa, mi boca se pregunta sobre el sabor de la tuya y es ahí cuando me doy cuenta que cuando se trata de ti no tengo noción de lo que es autocontrol.
Realmente no sé como lo hiciste o de que manera logras inyectar amortentia a mi corazón, pero el insomnio combinado con la duda de si podre probar tu boca o no, hacen que durante la noche yo pierda toda la razón.
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Poemas de un corazón no correspondido
PoetryCuando una persona nos gusta tanto a veces no encontramos las palabras desahogarnos y preferimos callar por miedo a ser rechazados, a no ser correspondidos, pero, por supuesto lo que más hacemos en esos casos es observar... Observamos a las personas...