Me gusta la noche, ésta dulce noche...
Ésta oscuridad que roba toda importancia, toda realidad se aleja, quedan aquí solo sueños, deseos, caprichos. Ver desde lejos ésta ligera y sutil cúpula cubriendo la ciudad, ésta cristalina prisión, éste ligero degrade brillante que escapa a la altura del cielo, al cosmos intrigante y sereno.
No es secreto que pienso en tí, no es curioso el porque, tu brillo que ilumina cuando el sol se esconde, cuando acepto que de tí estoy profundamente enamorada, de tu brillo inalcanzable, intocable, intangible.
Cuando acepto que el reflejo de tus colores en el mar me seducen, me calman, con todo tu esplendor se llena mi mente de recuerdos inauditos, recuerdos que jamás pronuncié a nadie ni con las palabras más nefastas.
El oír a las olas cantar en llanto sus vivencias, sus sufrimientos, sus voces suaves, sutiles, encantadoras, la melodía de esas estrofas amorosas que con fervor son cantadas al cielo en un grito ahogado.
Eres tú mi Luna, tú belleza llena de recuerdos, esos que me satisfacen, que dejan encantada mi mente, que con solo tú mutismo, haces presencia en mis noches de lo que sean, de cariño, rencor, calma, exhaustivo cansancio o quizás de lujuria.
Ésta no es la secuencia de calma antes del incontrolable desastre, simplemente es el barullo que abre paso al sosiego de tu asistencia, solo el ligero sonido hecho golpe que escapa de ésta cúpula cristalina donde soy prisionera, donde se abren las gigantes puertas a tú hermoso reino de vivaz color platino.
Tú brillo color plata logra cautivar mi mirada, a decir verdad, todos mis sentidos, solo verte hace que los sueños lleguen a mi mente como fugaces estrellas, como si fuese un acto de triste encanto, y con éste simbólico hechizo cierro mis ojos y transformo todo lo inimaginable en la más hermosa realidad, pasaré horas a la espera, con los ojos abiertos o cerrados, solo esperaré a que el ciclo se repita, para así, poder ver tu silueta sobre las armoniosas velas que adornan ésta dulce noche. Mí amada Luna.
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"Cuentos Cortos Sin Sentido"
De TodoSiempre he creído que las relaciones son algo más bien parecido a una red, quizá un telaraña, cada fino hilo suave como seda se dirige por una camino estructuradamente seguro, este mismo se encuentra con otros gracias al nudo del que desencadenan má...
