abrí mis ojos para apagar el insesante ruido de la alarma. seis de la mañana y ya me encontraba maldiciendo, estaba harta de absolutamente todo y a mis dieciséis años ya añoraba morirme. se que esa no es la postura mas madura, pero desde que nací no he sido nada más que una tragedia, mi padre nos abandonó a mi y a mamá, el ex novio de mi mamá nos corrió de nuestra propia casa después de haber abusado de mi madre y de mi, mis amigas de hace años me humillaron hablando basura de mi, la cague horrible muchas veces con amigos verdaderos que después perdí por mi culpa por supuesto. todo era un desastre y todo gracias a mi. me asee y salí de mi casa hacia la escuela.
-gracias mamá, nos vemos - le sonreí y salí del auto.
amaba a mi mamá a pesar de que, de alguna manera, yo era una tragedia en su vida, y no merecía tener a la reina de las estúpidas como hija. aun asi somos las mejores amigas, nunca le expreso mi tristeza u otros sentimientos mas profundos pero hablámos de multiples cosas y situaciones interesantes en nuestra vida, siempre supuse que con los pesares que ella cargaba era mas que suficiente.
entre al colegio más irritada de lo normal. ahí estaba el, el dueño de mis sollozos y mi tristeza, robert, hablando con la que tuvo la suerte de estar en ese espacio de su alma tan deseado por mi; maria. robert me gustaba desde hacia un año, eramos mejores amigos. me gustaba que fuera un patán con todas las chicas que se le acercaban, era divertido verlas añorar mi lugar porque el me quería de una manera diferente, quizá no como yo a el pero me respetaba y se sentía bien ser especial para el, me sentía afortunada de que me quisiera tanto. notablemente eso cambio y dejamos de frecuentarnos, tuvo innumerables peleas con maria y solo en esos momentos se acercaba a mi, no era del todo idiota sabia perfectamente que yo lo iba a escuchar, después me cansé de su cuento y deje de hablarle como antes, me sentía patética. arrojé mi mochila a la banca y me senté en el piso de la esquina del salón.
-buenos dias señorita vale mierda- dijo hanzel, mi mejor amiga.
hacia solo unos meses de que la conocía pero ya tenia un espacio en mi ser, siempre me apoyaba en cualquier cosa y nunca me demostró se lo contrario, es algo patético pero se comportó como ninguna otra.- hey ¿viste quienes estaban en el pasillo?- pregunte adivinando instantáneamente su respuesta en mi mente.
- joder ¿puedes olvidarlo por 5 minutos por favor?- contestó irritada haciéndome soltar una risita gracias a mi predicción.
- buenos días ramiel- era robert, saludandome tan amigable como siempre, quede paralizada cuando su brazo rodeo mi hombro.
- uh, hola rob- traté de fingir mi sonrisa lo mejor posible.
me estaba sintiendo incomoda con la mirada de su novia, o lo que sea que fuese así que tome su brazo y lo aparte de mi, segundos después agradecí al cielo de que el maestro haya cruzado el umbral en ese presciso momento.
- buenos días todos tomen asiento, en unos minutos vendrá la directora para darles un aviso muy importante, y creo que ya no debe de tardar- dijo ridículamente mirando su reloj de mano.
mas tarde la directora se paro en el umbral buscando la atención del profesor que ya se había distraído hablando con unas alumnas, carraspeo varias veces hasta que lo logro.
- buenos días a todos como ya les comentó su maestro les vengo a dar un grato aviso, gracias a el instituto de cambridge hemos logrado tramitar los intercambios de alumnos de diferentes partes del mundo, ayer comenzamos con los tramites y como pueden notarlo su compañera stella ya no nos puede honrar con su presencia debido a que ella ahora...- ignore todo su ridículo discurso porque que como siempre no me importaba.- y bueno les presento a su nuevo compañero, adelante - hizo una seña para que alguien pasara- este es su nuevo compañero sean amables con el y hagan que disfrute su estadía en esta institución. que tengan buen día.- se fue y un muchacho con la cabeza gacha entro al aula, en cuanto levanto su tímido rostro comenzaron los ridículos murmullos por parte de todo el salón, las típicas chicas apostando a que en una semana saldria con alguna de ellas, los chicos mirándolo severos y yo no importandome menos todo este embrollo.
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sorry for not being there ✿ lrh
Romancedonde una chica con una vida desastrosa conoce a un australiano de intercambio que se arrepiente de no haberla conocido antes.