Miéntele.

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[🫀]

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Acostado a un lado de Wilbur, ambos desnudos, dándole una calada a su cigarrillo que estaba en su mano, y expulsando el humo por la boca

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Acostado a un lado de Wilbur, ambos desnudos, dándole una calada a su cigarrillo que estaba en su mano, y expulsando el humo por la boca.

Estaba en el departamento de Wilbur por tantas razones que podían solo resumirse en su imagen desnuda a un lado del de rizos castaños. Alex volteó a ver aquél reloj colgado en la pared, miró la hora, 6:34 p.m., sabiendo que tenía que regresar a su casa rápido. No quería que se levantaran las sospechas.

No otra vez.

―Me tengo que ir, Wil, perdón...― Murmuró el azabache, dejando el cigarro en el cenicero sobre la mesita de noche a su lado, apagándolo. Se levantó de la cama, solo para buscar sus prendas tiradas en el suelo.

Wilbur lo observó levantarse, y se sentó en la cama, solo viéndolo.

―¿Tan rápido?― Preguntó, algo decepcionado por el tiempo limitado que parecieron tener ésta vez.

―Si no quieres que tu esposa levante sospechas, me tengo que ir― Respondió de vuelta, abotonando su camisa con lentitud, y se colocó su gorro en la cabeza, ahora solo buscando sus zapatos que se encontraban bajo la cama.

El castaño hizo una mueca ante el comentario, sabía que lo que ambos hacían era muy arriesgado, y lo sería más si le rogaba a Quackity para que se quedase a su lado más tiempo. Se levantó, copiando la acción en busca de su propia ropa que estaba tirada a su lado, sobre la alfombra de la habitación.

La mención de aquella mujer lo hacía estremecerse, su matrimonio era una mierda, si no fuera así, ¿por qué se buscaría un amante?, más bien, ¿Por qué su amante tenía que ser Alex Quackity, su "mejor amigo"?

Era fácil de responder para Soot.

Finalmente ambos ya estaban vestidos, parados frente a  la puerta principal del departamento de Soot, uno frente al otro, en un silencio cómodo, que no duró mucho, pues Alex lo rompió con sus palabras.

―¿Lunes?― Preguntó, haciendo que el otro lo pensara por un momento corto. No podía el Lunes.

―Ella estará― Respondió con simplicidad, viendo al de gorro hacer una mueca por aquella respuesta. Desearía que Sally no existiera, así aquella mujer no se interpondría en ellos todo el tiempo.

―¿Y?, dile que surgió algo en tu trabajo,puedo incluso llamarte para que se lo crea―

¿Haz oído del cliché de un romance con tu secretario?, no está muy alejado de la realidad aquél cliché aburrido pero interesante, si lo piensas bien.

El gran Wilbur Soot engañando a su esposa con un simple secretario, imagina eso en la portada de un periódico, damn.

―está bien, supongo― Dijo, jugando con sus dedos. No tenía mucha opción ahora, así que, se conformó con lo que el otro dijo, haciendo a Alex sonreír ampliamente.

Dale un beso antes de dormir― Tomó a Wilbur de las mejillas, para bajar su rostro, y plantar un beso de despedida en sus labios.

Siempre era una excusa para vivir.

El de rizos nunca entendería aquella frase, siempre la decía quackity antes de despedirse de él, pero era divertido, al menos para él lo era.

Vió a Alex irse, alejándose por el pasillo del edificio, para subir al ascensor, y finalmente, desaparecer de su vista gracias a aquellas puerta metálicas que se cerraron frente a él. Soltó un suspiro agotado, y volvió a cerrar la puerta del departamento, viendo el reloj, solo en espera de que su esposa llegara.

Los matrimonios son complicados.

O no lo sé, soy solo un adolescente de 15 años que está escribiendo ésto.

. . .

Sally mataría a Wilbur por enterarse, una vez los descubrió, supuso que el británico había terminado con aquél latinoamericano cuando lo enfrentó, pero solo fué otra mentira de Soot. La mujer suponía que su esposo era feliz con ella, pues así debió ser, los padres de Wilbur le habían prometido que tarde o temprano el castaño se enamoraría de ella, y que no resistiría sus "encantos"

Le mintieron, obviamente, a ellos no les importaba Sally, les importaba más Wilbur.

Aquél matrimonio solo era una falsa esperanza de que el británico se curara de su "enfermedad", convenciendose de que él era completamente normal, un hombre hecho y derecho para manejar las empresas de su padre. La familia Soot sí que era extraña algunas veces.

Un hombre aburrido que decidió sentir la adrenalina de tener a un amante, y así fué cómo Quackity cayó en las garras de Soot. Alex Quackity, un joven bastante agradable y mejor amigo de Wilbur desde secundaria, sin embargo, ya era hasta sospechoso porqué ya ascendió más de 4 veces su sueldo...

Nah, quizás trabajo honesto y muy bien hecho, creyeron sus padres.

Pero ¿quién no querría a Sally?, ella era perfecta, una buena esposa, la mujer que a sus propias palabras, cualquier hombre desearía.

Pero Wilbur no era ese tipo de hombres.

Soot escogió a aquél chico lindo de lunares.

. . .

Me nerfearon metiéndome a terapia, era por el bien de la trama 🔥

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Me nerfearon metiéndome a terapia, era por el bien de la trama 🔥

832 palabras.

―Charly 🐀

One shots(? || quackbur !Donde viven las historias. Descúbrelo ahora