Rivales enamoradas || (Jemma)

Capítulo seis

Era el último día de clases.

Las semanas siguientes pasaron volando y al
fin Jenna ya no tendría que estudiar para cadamaldito examen, era realmente un alivio. Más aún cuando últimamente las chicas del grupito le habían hecho la vida imposible y ahora que acababan clases, no las vería durante dos meses.

Dos hermosos y largos meses.

De alguna manera, aquello debía de alegrarle.
Estaría divirtiéndose con sus amigos y sin la
presencia de la imbécil de Emma Myers,
pero no pudo evitar sentirse deprimida todo eldía. Podía notar que Melissa se mostraba al igualque ella. La única que parecía realmente feliz era Maddie quien no dejaba de sonreír.

Hoy no había razón alguna para ir a la
biblioteca, así que no lo hizo, Jenna tampoco
creía que la rubia fuera a ir. Pero, al llegar al
comedor y no encontrar a sus amigas, se asustó.
Fue al primer lugar donde esperó encontrarlas y ese sitio era el baño.

-¡Son una zorras!-escuchó la voz de su mejor
amiga hablar, Maddie.

-¿Qué coño les pasa?!-bueno, últimamente su otra mejor amiga había mejorado el carácter, seguía siendo tímida pero a veces soltaba unos tacos cuando estaba muy furiosa.

Jenna entró al baño y se encontró con las dos chicas cubiertas de pintura rosa. Habría reído si no fuera porque las dos chicas parecían furiosas y Jenna no quería que se desquitaran con ella.

-Siendo honesta, Maddie, tu color no es el
rosado-intentó bromear y las chicas la
fulminaron con la mirada -. A ver, ¿Jasmin? ¿Emma? ¿Joy?¿Quién fue?
-Todas ellas-respondió una molesta Melissa y después de quitarse el pegote del cabello, soltó un chillido-.¡ Cómo detesto a Jasmin!

-¡A todas esas malcriadas!-dijo Maddie, sin
referirse a alguien en especial.
Jenna si lo había hecho. No soportaba
específicamente a Emma , pero no lo dijo.

-¿Cómo sucedió?-preguntó, dejando su mochila, en el suelo y abriéndola.

Le entregó una camiseta limpia a su amiga
y luego una sudadera a la rubia. Ya era la
costumbre traer ropa de cambio, desde
principios de año que llevaba haciéndolo,
aunque sus amigas nunca siguieran su consejo.

A Jenna le era muy útil.

-Estaba abriendo mi casillero tranquilamente, Maddie estaba conmigo- comenzó a decir Melissa mientras se lavaba la cara y el cabello, después se despojó de su camiseta y se colocó la que Jenna le había entregado-, Entonces, de la nada,
algo explota en el y cuando abro los ojos estoy cubierta de pintura.

-Yo, por estar allí, también fui bañada en
pintura. Qué desagradable-dijo Maddie, también quitándose la camiseta sucia y colocándose la sudadera.

-Qué zorras-comentó una Jenna sorprendida, ellas cada vez mejoraban sus métodos de acoso para las chicas.

-¡Y Emma! Ella es una perra-dijo muy enojada Maddie y pudo ver como Melissa también la apoyaba, asintiendo.

-Emma simplemente pasó a nuestro lado y
nos tomó varias fotos mientras se reía. Ahora deben de estar por toda la red escolar-dijo echando humo y Jenna abrió los ojos ¿Emma había hecho aquello?

-Ella... ¿Hizo eso? le sorprendía, ya que hasta el momento la rubia nunca había participado directamente en las bromas.

-¡Sil-vociferaron los dos, ahora más limpias, y Jenna tomó asiento en el frío adoquín del baño.

Ya era una costumbre para ellas sentarse en
el sin temor a que las vieran, nadie nunca
utilizaba el baño del tercer piso.

-Supongo que todas son zorras-susurró un poco decepcionada, pero luego pareció molestarse.