yo me encargo BKDK omegaverse

Epilogo: La boda

Después de todo lo que había pasado, la reconstrucción de la mansión Toshinori los altos mandos cayendo por su corrupción y tratando de regresar la gobernatura a un mejor estado, la pareja enigma y omega dominante pasaron unos días juntos, el alfa se dedicaba a mimar a su pequeño y hermoso "rollito de canela" (como le dijo Mitsuki que lo llamara) después de todo el omega pecoso había estado bajo estrés y preocupación tanto por lo que hizo ese par de alfas con su reputación como por que el mismo Katsuki fue a hacerse cargo de todo.

Como buen alfa Enigma se encargo de darle todo lo que pedía en cuanto a antojos tuviera durante el embarazo, lo que más adoraban ambos es que ese hermoso ángel Dominante se volvía una fierecilla lujuriosa, eso traía más que loco al Enigma oji rubí que le daba como cajón que no cierra mientras volvía a morderlo y marcarlo como suyo, al peli verde no hacía más que gustarle que su enorme enigma lo tratara rudo y lo marcara una y otra vez amaba esa parte de Katsuki y como lo impregnaba siempre con su olor a pesar de no salir a ningún sitio durante ese par de semanas que estuvieron en su departamento, sabía que Kacchan se arrepentía de algo y ese algo era haberse ido por tres años.

Aunque no sabían su nombre en ese momento de Camie hubiera sido ideal el encargarse de eliminar a esa asquerosa omega desde un principio, sobre todo cuando su peli verde le llamó, contándole como la omega con la que una vez el hermano mayor de su mejor amigo Shoto con la que ya habían tenido problemas antes había vuelto a intentar quitarle el alfa a uno de los Todoroki, el pobre omega Shoto estaba entre deprimido y enojado, se encontraba con Izuku también llorando por como Inasa casi había cedido ante sus feromonas para que la marcase, aun así la dejaron vivir suponiendo que no la volverían a ver.

Una noche en la que Izuku descansaba sobre el desnudo pecho de Katsuki, el alfa lo observaba como la cosita más maravillosa del mundo, se puso a pensar que su ida a otro país solo para protegerlo había sido una tremenda estupidez, un error que jamás debió suceder ni cometer, se odiaba por haber dejado a su hermoso compañero solo, lo peor era que en las garras de otros alfas ridículamente ambiciosos, se arrepentía completamente de tal imbecilidad, de haberse quedado o de haberse llevado a su precioso Jade nada hubiera pasado, todos estarían tranquilos.

Habían noches que no podía dormir su conciencia y su lobo interior le refutaban el por qué su Omega había sufrido tanto, se culpaba por ese lapso de años, muchas veces fue el omega que despertaba y lo calmaba con sus feromonas o diciéndole que no importaba si él se iba o se quedaba, el pecoso siempre lo amaría hoy mañana y siempre, desde niños incluso cuando presentaron sus castas sabían que se amaban, que eran destinados y entendía el por qué se fue lo amaba tanto que prefirió cuidarlo de lejos, aunque eso lleno de tristeza al omega quien estuvo un tiempo por no decir meses en depresión.

Si no se hubiera ido para ese entonces su omega y el tendrían por lo menos cerca de cuatro años de casados y quizás 3 cachorros hermosos, con esa idea en mente acaricio las mejillas pecosas soltando feromonas entre alegres, calmantes y de arrepentimiento, el pecoso se removió ante el cariñoso contacto de su alfa marcándolo con sus feromonas inconscientemente, Katsuki sonrió ligeramente pronto tendrían a su primer cachorro, después de acariciar las hermosas y pecosas mejillas de su Deku bajo la mano yendo hasta el pequeño vientre abultado, se sintió relajado en paz y pasando unos minutos se quedó dormido.

Katsuki haría lo que sea y fuera por su omega y verlo ahí para el de ahora en adelante lo hizo tremendamente feliz, dejo de tener más frecuentemente esas pesadillas, todo eso le hizo entender que ese siempre fue su lugar al lado de Izuku Toshinori, se armó de valor y un día saliendo a traerle tarta de moras, pudin de chocolate, almejas fritas picantes y helado también picante, paso por una vitrina donde vendían anillos de compromiso, no lo pensó más, escogió los de compromiso y de paso los anillos de boda, se dirigió a su departamento le dio todos sus antojos a su pecoso que gustoso se deleito con los manjares que su alfa le daba.