¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Me quedaría a dormir en casa de Pericles, no quería volver a mí casa, allí estaría Xavier, no quería verlo, no quería recordar esa noche, no quería recordar la manera en la que me había fallado a mí misma.
¿Me sentía cobarde? Si, es obvio, nunca fui así, tan débil por alguna situación, pero esto era sumamente diferente a las cosas que me he enfrentado, esto era algo emocional y yo no tenía el control de ello, ni siquiera sabía bien lo que sentía, en como sería estos nuevos sentimientos que crecen en mí interior.
Todo era nuevo para mí.
(...)
Hoy seria el día en que el plan para conquistarla empezaría, quería que sienta lo mismo que yo siento, estaría decidida a conquistarla, cueste lo que cueste.
Iba caminando por los pasillos, pensando en que detalle hacerle, recordando lo que había charlado con mí hermano la noche anterior.
‹Flash Back›
—Podrias hacerle un detalle lindo, como darle flores, cartas, peluches o maquillaje, algo menos tu. Pero sería mejor que se lo des anónimamente como primer paso ¿Que tal se entera que eres tu y se espanta?—
.—bufe—. ¿Unas Dalias negras?—
—¡¿Que?! .—grito—. ¡Por supuesto que no! Unas rosas estarían mejor ¡Piensa, Wednesday Addams!—
‹Fin del Flash Back›
Y eso hice, compré un ramo enorme de rosas, solo costaron 100 dolares, no es mucho, con tal de conquistar a esa fastidiosa chica, haría lo que sea.
No suelo ser una persona romántica, pero tengo sangre Addams, es obvio que daria lo que fuera por la persona que me gustara.
Entre al salón de clase, todos quedaron en silencio y allí estaba ella, hoy seria el último día dónde ella vendría a mí oficina ¿Y si le ponía otro castigo?
—Buenos días .—dije—.
La clase se dio a la perfección, como siempre, yo era la profesora, era obvio que todo estaría más que perfecto.
—Enid Sinclair —ella volteó—, La espero en mí oficina .—asintio—.
(…)
Fui a donde mí oficina se encontraba, al abrir la puerta le encontré ¿Durmiendo o desmayada? ¡¿Estaba desmayada?!
Deje todo en el suelo y me acerque a ella rápidamente, la sacudí y se despertó inmediatamente, al final solo se encontraba durmiendo, tenía unas terribles pero lindas ojeras.
—¡¿Q-que!? ¡Terremoto! —grito y yo la tomé de ambos hombros para tranquilizarla—,
—Esta bien, solo fui yo, pensé que te había pasado algo ¿Estás bien?—
—¡Por dios! ¡¿Quiere que me muera?! —suspiro, apoyando una de sus manos en su pecho dramáticamente—, Si estoy bien, gracias por preguntar, solo algo cansada—
—fui hasta donde había dejado mis cosas y las tomé, me dirigí a mí asiento, sentándome frente ella, mirándola a los ojos—, ¿Por qué?—
—No pude dormir, no se que me pasa, hace días que no duermo bien —se acercó peligrosamente a mi—, Mire mis ojeras —las observé, pero mis ojos se dirigían a los suyos, eran tan bellos, sin duda eran los mejores ojos celestes que podía haber visto. Quedamos algunos segundos hipnotizadas, mientras nos mirábamos con mucha intensidad, hasta que la puerta sonó—,
¡Maldita puerta!
—Pase .—dije desanimada—.
Entro un hombre con un gran ramo de rosas, eran las mías. Vi sus ojos y tenían un gran brillo, creo que si le gustaron.
—Enid Sinclair, son para usted—
—¿Eh…? ¿De quien?—
—No me lo han dicho —le entrego el ramo y el hombre se fue, veía su cara de asombro—,
—¿Te gustaron? .—pregunte—.
—Son hermosas, aún que prefiero los tulipanes—
No puede ser ¡Tenía que haberle comprado tulipanes!
Cometería un asesinato.
—Oh, bueno ¿Pero si te gustaron?—
—¿Por qué lo pregunta? ¿Acaso usted me las regalo? —puse un semblante serio, ella solo comenzó a reír—, ¡Por dios! Solo bromeo, tu ni loca me darías esto—
Si ella lo supiera.
—Nunca gastaría 100 dólares en ti—
—¿Como sabe que salen 100 dólares?—
Mierda…
—No lo se, solo hago suposiciones, ahora, corrige los exámenes que te faltan —ella rodeo los ojos y dejó el ramo a un lado—,
(…)
Las horas pasaron extremadamente rápidas, en un parpadeo ya era hora de que Enid se retirará de mí oficina y yo iría a mí casa…
No quería llegar a ese momento, no quería volver a verlo.
Decidí llevar a Enid nuevamente hasta su hogar, tardaría algunos minutos más antes de ver a Xavier y con eso estaría satisfecha, mí nerviosismo bajo un poco, trate de pensar en manera positiva, pero eso no era mi fuerte, entre más pensaba, más cosas horribles me imaginaba.
En el camino, mientras conducía, notaba como Enid iba tarareando una canción que provenía de sus auriculares, esto ya estaban a punto de dejar de funcionar.
Decidí dejar de prestarle atención y mejor hacerlo en el camino, no quería ningún tipo de accidente hasta el momento.
_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _
Holapp, en este capítulo no me esmere mucho, pero espero les guste.
