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Capitulo 14: Conociendo a la "suegra"

Entre trabajo y universidad la semana pasó volando con un destino directo al jueves. Nada relevante había ocurrido.

Estaba en casa, Axel una vez más no había venido con la tonta escusa de entrenar. Por suerte no hubo tanta espera por parte del autobús.

Una manta con estampado de rosas cubría mi cuerpo del frío del split, tenía mi celular en mano mientras conversaba a través de la pantalla con Caleb. Un nuevo mensaje ocupó mi barra de notificaciones.

Será mañana, estate preparada.

Mi corazón involuntariamente dió un vuelco, no entendía por qué me había emocionado.

El mensaje era de Axel. Me tomó completamente por sorpresa. Sabía a qué se refería por lo que simplemente respondí con un Ok.

Axel:
Luce presentable por favor, como si te importase enserio su aprobación.

Khloe:
Siempre lo hago.

Axel:
Lo que tu digas.

Khloe:
Por favor, claramente siempre luzco bien y además es obvio que me importa la aprobación de tu madre. Después de todo ese es el punto.

Axel:
Claro, sí.

Khloe:
¿Debería ir con vestido o en pantalones? ¿Dónde será?

Axel:
No es nada fuera de lo normal, ve como quieras ir, tan solo que se note que te importa la ocasión.

Khloe:
Perfecto.

Cada mensaje significada una larga espera de su atención, esta era probablemente la charla más larga que hayamos tenido por texto. Tampoco es que conversemos mucho en persona pero bueno, mera diferencia si hay.

Estaba a tan solo un día de dar un paso muy grande y a la vez muy extraño. ¿Cómo era posible que conociese a su madre? Nunca se presentó en la escuela primaria. Aveces pensaba en el hecho de que no tuviese, pero con el tiempo olvidé mi errónea suposición. Ni siquiera conozco a los padres de Jeremy, no he tenido la oportunidad. Aunque bueno, tampoco sé si les ha hablado de mí.

(...)

Todas las tardes luego del almuerzo comenzaba con mis clases de derecho, esas que tanto aborrecía. Siempre lo ví como una buena carrera pero no era para mí. La dificultad había aumentado, necesitaba aprenderme varias leyes y nunca había sido mi fuerte la memoria. Cuándo hay pasión la necesidad de esfuerzo y dedicación está de más, era simplemente eso, mí falta de pasión. He llegado a sentir fastidio de mí futura profesión. Solo deseaba dedicarme a la pintura, al arte, a lo que amo.

—Cariño, ¿te llevo?— Preguntó Jeremy encaminándose conmigo hasta las afueras de la universidad. Con el tiempo apesar de aún sentir un agotador peso encima mío había comenzado a sobrellevarlo. Me costaba mirarle a los ojos y no sentir todo esa basura que era. Él, un chico de un corazón tan puro y noble. El chico perfecto, y yo una simple idiota que no piensa en los demás.

—No te preocupes, esperaré el autobús.— Aseguré mientras aún caminando sonreía agradecida por su ofrecimiento.

—Sabes Khloe, aveces siento que estás un poco alejada de mí, como si estuvieses intentando evitarme.— Admitió analizandome con sus verdosos ojos.

—No es eso, Jeremy. Perdona si te he hecho pensar algo tan erróneo como eso, es simplemente que estoy muy ocupada, entre el trabajo y la universidad no tengo tiempo para dedicarme a nada más. Créeme, si fuese por mí estuviésemos más que juntos.— Sonreí con lástima pero no hacía él, sino más bien hacía mi misma.

—Bueno pues ya está, cena esta noche.— Afirmó animado.

Estaba apunto de asentir igual de emocionada pero la presencia de alguien a lo lejos me hizo recapacitar. Hoy era el día. No tendría tiempo para pasarlo con Jeremy sabiendo que hoy conocería a la madre de Axel.