ℂ𝕠𝕞𝕡𝕒𝕤𝕖𝕤 𝕕𝕖 ℂ𝕠𝕟𝕗𝕚𝕕𝕖𝕟𝕔𝕚𝕒𝕤

77 11 1
                                    

Las clases comenzaron como cualquier otro día normal

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Las clases comenzaron como cualquier otro día normal. La rutina no cambiaba en lo absoluto y no había nada particularmente interesante en ella. De hecho, la mayoría de los estudiantes la encontraban bastante aburrida. A nadie le gusta estar sentado dos horas seguidas escuchando lecciones de matemáticas o historia, aunque fueran materias importantes. Pero la importancia de la materia no quita el hecho de que las clases sean monótonas y, a veces, incluso tediosas. Sin embargo, en medio de lo estresante y aburrido de las clases había un momento de paz y tranquilidad: la hora del almuerzo. Todos los estudiantes salían de sus salones y se dirigían al comedor principal, deseosos de saciar su hambre y disfrutar de un respiro tras tantas horas de estudio.

En medio de la gran avalancha de chicos y chicas que llenaban el comedor, había una mesa donde dos personas estaban sentadas, conversando entre sí mientras esperaban a dos amigos más. Ochaco Uraraka y Tenya Iida charlaban tranquilamente, disfrutando de esos minutos de espera. La primera en llegar con su bandeja fue Ochaco, seguida de cerca por Tenya. Se sentaron en la mesa habitual, la que siempre ocupaban para compartir esos momentos de compañerismo y camaradería. Poco después, llegó Shoto Todoroki, el chico de cabello rojo y blanco, con su bandeja de comida en la mano.

"¿Y Midoriya?" preguntó Todoroki, notando la ausencia del chico de cabello verde.

"¿No estaba contigo?" inquirió Iida, extrañado.

"Para nada, pensé que ya estaría aquí. No lo he visto desde hace un buen rato, de hecho," admitió Todoroki mientras dejaba su bandeja sobre la mesa. La falta de Midoriya era realmente extraña. No solía perderse así sin más. A menos que All Might lo hubiera llamado para comer juntos, en cuyo caso siempre les avisaba que no podría acompañarlos. Otra posibilidad era que algo malo hubiera sucedido. Sonaba exagerado, pero con Midoriya nunca se sabía. Era propenso a involucrarse en situaciones un tanto peculiares.

"Qué extraño, ahora que lo dices, tampoco lo vi de camino aquí," comentó Uraraka, igual de confundida que sus dos amigos.

"Iré a buscarlo," anunció Todoroki, decidido a encontrar a su amigo.

"Te acompañamos," propuso Iida, dispuesto a ayudar, pero Todoroki negó con la cabeza.

"Descuida, no creo tardar mucho en dar con él," respondió Todoroki. No quería que sus amigos se molestaran en acompañarlo. Podía manejarlo solo. "Prometo no tardar."

"Está bien, envíanos un mensaje si pasa algo," le pidió Uraraka, y Todoroki asintió en silencio antes de marcharse.

Mientras caminaba por los pasillos, Todoroki suspiró con cansancio. ¿Dónde se había metido Midoriya esta vez? A veces sentía que era una especie de niñera para él y Bakugo. Siempre que pasaba algo con esos dos, él terminaba involucrándose de alguna manera. Si no era Bakugo queriendo pelear con Midoriya, era Midoriya desapareciendo y apareciendo en algún lugar inesperado. Algún día esos dos le iban a sacar canas y harían que su cabello, en lugar de ser mitad rojo y mitad blanco, fuera completamente blanco.

Armonía Disonante (Todoroki x Jirou)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora