Capítulo 18

353 43 6
                                    

Sunghoon

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sunghoon

Las voces fuertes en la otra habitación me despertaron. Me tomó un minuto mirar a mi alrededor para darme cuenta de dónde estaba y qué había sucedido anoche. Me senté y luego me froté la cara con las manos. Bueno, al menos Heeseung me había trasladado a la habitación antes de que alguien me viera, pero todavía tenía que hacer el paseo de la vergüenza para salir de la habitación del hotel.

Miré a mi alrededor hasta que vi mi ropa cuidadosamente doblada en una pila en una silla junto a la puerta. Salí de la cama y entré al baño antes de vestirme. Necesitaba echarme un poco de agua en la cara y rezar para que hubiera un cepillo que pudiera usar. Puede que tuviera que usar la ropa de ayer, pero al menos podría intentar parecer humano.

Tan pronto como terminé en el baño, regresé al dormitorio y me vestí. Heeseung incluso había traído mis zapatos, lo cual fue una gran ventaja.

Aún podía escuchar voces de la otra habitación, pero no eran tan fuertes como cuando me despertaron. Supuse que, con quienquiera que hablara Heeseung, les había dicho que bajaran la voz.

Me acerqué a la puerta, ladeé la cabeza y traté de escuchar, de saber con quién podría estar hablando Heeseung. No, no tenía ni idea. Sabiendo que no tenía otra opción, abrí la puerta y salí del dormitorio.

Dos hombres se volvieron instantáneamente para mirarme. Uno que quería ver. Uno que esperaba no volver a ver nunca más.

Ignoré a Felix y me acerqué a Heeseung.

-Necesito volver.

-¿Puedo ir?-Preguntó Heeseung.

Asentí. Sabía que él querría venir a conocer a Yunjin más temprano que tarde, y yo también lo hacía.

-¿Por qué no vienes un poco antes del almuerzo? Podemos ir al parque a jugar y luego almorzar cuando regresemos.

Heeseung sonrió antes de inclinarse para rozar nuestros labios.

-Me gustaría eso.

Le devolví la sonrisa.

-Te veré luego.

Me dirigí hacia la puerta sin decir una sola palabra al hermano de Heeseung. Realmente no tenía nada que decirle, al menos nada agradable.

-¿No vas a saludar, Sunghoon? Eso es bastante grosero, ¿no crees?

Me di la vuelta y sonreí dulcemente.

𝗢𝗡𝗘 𝗧𝗜𝗠𝗘 » 𝗛𝗘𝗘𝗛𝗢𝗢𝗡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora