—y dime Selene, ¿Puedo... puedo saber más sobre esto? —preguntó, con cautela.
Selene se mordió el labio inferior, sintiéndose un poco nerviosa, pero decidió confiar en él.
—Bueno, es un negocio que he estado manejando desde hace un tiempo —explicó, sintiendo que el rubor se apoderaba de sus mejillas—. Vendo fotos y videos de mis pies a través de OnlyFans, y ha sido bastante lucrativo.
T/N la escuchó con atención, y Selene pudo ver que no había juicio en su mirada, solo una genuina curiosidad.
—Entiendo —dijo T/N, asintiendo lentamente—. Y, ¿te sientes cómoda con esto?
Selene se tomó un momento para reflexionar sobre la pregunta.
—Sí, me siento cómoda —respondió, con más seguridad—. Es una forma de ganar dinero extra, y me permite tener más control sobre mi vida.
T/N le dedicó una sonrisa comprensiva.
—Entonces, te apoyo —dijo, colocando una mano sobre la de Selene—. Sé que esto es importante para ti, y puedes contar conmigo.
Selene sintió que una ola de alivio y gratitud la inundaba. Saber que T/N la apoyaba significaba mucho para ella, y le daba la confianza que necesitaba para seguir adelante con su negocio.
—Gracias, T/N —dijo, sonriendo con sinceridad—. Eres el mejor.
T/N le devolvió la sonrisa, y puso manos ala obra
Los siguientes días fueron un torbellino de actividad para Selene y T/N mientras se sumergían en su nueva empresa conjunta. T/N se había integrado a la operación con entusiasmo, analizando las estadísticas de la cuenta de OnlyFans de Selene y ofreciendo ideas para optimizar su contenido y alcance.
—Bien, según los datos, tus fotos con calcetines son las que más éxito tienen —dijo T/N, estudiando la pantalla de la computadora—. Los seguidores parecen disfrutar del toque de misterio y anticipación.
Selene asintió, sintiéndose un tanto incómoda al discutir tan abiertamente sobre sus actividades en la plataforma.
—Sí, he notado eso también —respondió, jugueteando nerviosamente con uno de sus mechones de cabello—. Supongo que les gusta la sensación de exclusividad.
T/N sonrió y se reclinó en la silla, cruzando los brazos sobre el pecho.
—Perfecto, entonces vamos a explotar eso —dijo, con un brillo de entusiasmo en los ojos—. ¿Qué tal si probamos con un nuevo disfraz? Algo que les dé a los suscriptores una experiencia más inmersiva.
Selene se mordió el labio inferior, sintiendo que el rubor se apoderaba de sus mejillas. La idea de usar disfraces y jugar a la seducción delante de su primo la hacía sentir vulnerable.
—No lo sé, T/N —dijo, dubitativa—. Eso se siente un poco... demasiado personal, ¿no crees?
T/N se acercó a ella y colocó una mano reconfortante sobre su hombro.
—Vamos, Selene, confía en mí —dijo con suavidad—. Sé que puede ser incómodo, pero piensa en lo mucho que podríamos ganar si logramos enganchar aún más a tus seguidores.
Selene suspiró y desvió la mirada. Sabía que T/N tenía razón, pero la idea de vestirse y posar de una manera tan provocativa delante de él le resultaba sumamente intimidante.
—Está bien —cedió finalmente, aunque su voz sonaba temblorosa—. ¿Qué tienes en mente?
T/N sonrió ampliamente y se levantó de un salto.
