Expectant -Drarry ( Traduccion)

.ii.

Toda esa noche se había sentido como un sueño para Harry.

Nunca disfrutó mucho del ambiente de un club: la presión implacable de los cuerpos de extraños, la música que, después de un momento, era básicamente ruido , la forma en que todos, todos a su alrededor parecían tan decididos a pasar un buen rato .

O tal vez fue sólo Harry. Tal vez fue él quien no supo cómo relajarse y simplemente... estar por una noche.

Era el cumpleaños de Seamus y Harry no había podido negarse, ni había podido salir de allí mucho antes de quedar realmente jodido, por lo que a las once y media de la noche se encontró viendo confusamente a Seamus agregar una pequeña pastilla dorada de algo para su enésima bebida. Seamus sonrió ampliamente y le entregó el vaso con un fuerte "¡ tíralo hacia atrás, tonto!" y Harry había hecho una mueca y malhumorado deseaba tener mejores amigos mientras obedecía.

El resto de la noche fue un poco borroso y Harry lo recuerda en fragmentos confusos: Seamus trepando a la barra y bailando obscenamente durante cuarenta segundos completos antes de caerse y terminar con un fragmento de vidrio de su botella de pinta incrustado. en su brazo, gritándole a Dean que le salvara la vida antes de morir en su cumpleaños, Ron siguiendo a una joven sorprendida con cabello permanente gritando Hermione, ¡no me ignores! mirándola todo el tiempo, hasta que Neville, que se reía impotente, lo arrastró lejos, disculpándose profusamente con ella; Ron y Neville intentaban demostrarle a Seamus, Dean y Harry cómo se ve un baile mágico tradicional mientras la gente a su alrededor se apartaba apresuradamente murmurando en voz baja mientras Neville giraba vigorosamente y hundía peligrosamente a un Ron desequilibrado.

Harry recuerda estar tan completamente fuera de sí que cuando finalmente vio la cabeza del rubio platino, brillando bajo las luces estroboscópicas multicolores, no se había dado más de dos segundos para considerarla antes de deambular, con los oídos zumbando y la visión nadando. . Se había sentido como alguien que normalmente nunca sería, alguien que regularmente y alegremente bebía tragos con misteriosas píldoras mezcladas, alguien que no encontraría nada más divertido que gritarle a su amigo que se subiera a una barra y empujara. su pelvis en la habitación; se había sentido más imprudente que en años, se había sentido eufórico y libre de una manera que había asumido que nunca volvería a sentir, y para cuando se acercó a Malfoy, Recostado descuidadamente contra un pilar, Harry había dejado de pensar.

Malfoy se parecía exactamente al sueño en el que Harry estaba seguro estaba. Puntiagudo como siempre, insoportable como siempre, Malfoy había estado etéreo esa noche, fascinantemente hermoso hasta el punto que Harry se sintió desconcertado por ello. Había sido arrogante y engreído de una manera que había hecho que Harry quisiera arruinarlo .

Malfoy había sonreído, gruñido, chasqueado y burlado, y había llevado a Harry a una pequeña persecución inútil por todo el lugar antes de terminar en un cubículo allí mismo, en el baño de caballeros de ese estrecho club nocturno muggle en Wandsworth, Malfoy gimiendo suavemente mientras Harry lo había presionado con la mejilla primero contra la puerta y lo había empujado hacia su delicioso y salvaje trasero con toda la fuerza y ​​energía abrasadora que sentía corriendo por sus venas. Probó la boca de Malfoy, su piel, pasó sus manos por su increíble y aterciopelada suavidad; había envuelto sus dedos alrededor de la esbelta y palpitante polla de Malfoy, se había deleitado con los sonidos que Malfoy hacía mientras Harry se salía con la suya con él, su delgado y pálido cuerpo flexible y dispuesto en los brazos de Harry.

Y mientras follaba a Malfoy, por primera vez en meses, por primera vez desde que lo mordieron, no había pensado en el lobo. Su mente no se había centrado en la fea y manchada cicatriz rosada en su flanco izquierdo. No había estado agonizando por el hecho de que técnicamente es un depredador peligroso infectado con una enfermedad que no se puede curar, y que si no fuera por sus pociones, sería considerado una amenaza para la sociedad.

Había jodido y jodido y jodido a Malfoy contra la endeble puerta de madera contrachapada, arrancándole gritos impotentes y demandas desvergonzadas, hasta que ambos se estremecieron con el orgasmo y Harry se derramó dentro de él durante tanto tiempo y con una intensidad tan formidable que casi quedó ciego por ello.

No recuerda mucho después de que Malfoy se arreglara la ropa, le lanzara a Harry una mirada indescifrable con los ojos muy abiertos y saliera del cubículo. Se había despertado en la habitación de invitados de Ron y Hermione a la mañana siguiente, avergonzado y mortificado, pero con cada detalle de su espectacular polvo con Malfoy todavía de alguna manera claro como el cristal en su dolorosamente palpitante cabeza, y había pensado... eh, bueno, sucede una mierda.

Y ahora, un mes y medio después, se da cuenta de que sí, bueno, vaya mierda . Y cómo .