chapter three: self love

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Ya habían pasado dos semanas desde que Dimitri comenzó el tratamiento para quitarse la marca de su cuello, la marca se ha estado desvaneciendo poco a poco, ya no le duele tanto como antes.

Hoy estaba practicando algo nuevo con su cocinero, abellen, el beta encargado de la cocina, Dimitri le había pedido consejos de cocina cosa que el cocinero aceptó encantado.

Ambos estaban esperando que el pastel de chocolate se terminara de hornear.

El beta noto la mirada perdida de su zarina — mi zarina, por qué está tan desanimado...? — pregunta.

— no por nada. — dijo, giro la mirada hacia otro lado — solo estoy cansado — termino.

— mi zarina.. usted está siguiendo el tratamiento de desenlace...? — pregunto asombrando a Dimitri ¿Cómo el cocinero sabía eso?

— s-si...cómo lo sabes..? — Dimitri lo miro.

— es muy fácil deducirlo...— musitó el beta— además .. usted ya no muestra su marca con orgullo...lo veo...y me parece que..le da vergüenza.

— no para nada! No me da vergüenza! Y-yo adoro mi Marca!! Y-yo, yo...— el Omega estaba tratando de justificar..seguía aferrado a la idea de amar a caesar a pesar de que ya se estaba deshaciendo de la marca en su cuello.

— mi zarina...el mayor error que usted puede continuar comentiendo...es engañarse a si mismo, por qué el amor no correspondido es mejor a lo que usted sufre constantemente...— dice el beta, levantándose de su asiento y posando su mano en el hombro de Dimitri — yo le hice una promesa a su padre...que siempre lo protegería. Creo que el momento ha llegado.

Los ojos de Dimitri se empañaron de lágrimas gruesas de tristeza — y-yo...yo ya no quiero sentirme así! Yo quiero ser feliz... quiero que el me mire como yo lo miro!! — decía en llanto mientras abrazaba a su leal cocinero.

— ya tranquilo...yo estoy aquí para usted... relájese...— lo abrazo..si tuviera feromonas ya las habría usado para calmar a Dimitri.

— mamá....— susurro el Omega aferrándose al beta.

Este se conmovió, aún abrazando al Omega — mi pequeño no siga llorando, usted debe ser fuerte aún si sufre... usted debe seguir adelante y ser feliz. — lo abrazo aún más fuerte.

— no quiero seguir así...al parecer tire todas tus enseñanzas y las de mi padre por la borda ..— ambos hombres rien por lo dicho.

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Ya habían pasado varios días, ya eran tres semanas, faltaba una semana para terminar el tratamiento, hoy era un día en que Dimitri prefería estar encerrado en su habitación y no salir nunca, caesar trajo a la mansión a un Omega dominante de cabello negro azabache y rasgos faciales asiáticos, era el abogado de Nikolai, Dimitri lo vio, sabía que ese omega era mucho mas lindo y hermoso...

Dimitri lloro todas las mañanas desde hace tres días que el abogado se ha estado quedando en la mansión, dejando sus feromonas a rosas y chocolate por todo el lugar...

Y sorprendentemente, las feromonas de aquel abogado combinaban con las de caesar...{rosas y champagne} Dimitri se puso aún más decaído cuando el abogado y caesar estuvieron todo el día encerrados en el despacho del rubio.

Dimitri tuvo que buscar consuelo en su guardiana, en Yuri, en abellen, pero nada servía...solo sentía dolor, por qué caesar....?

No puede mirarme como lo ve a el.

Pues Dimitri noto el brillo en los ojos de caesar cuando veía al Omega asiático.

Era una mirada de interés genuino.

Cada vez que Dimitri piensa en esa mirada que anhela...le duele aún más..pero como puede amar a alguien...si no sé ama a si mismo..?

Bueno, eso es muy fácil, cuando era niño Dimitri, su madre biologica fue la principal encargada de hacerle entender que no era más que un insignificante insecto, aún que nadie lo creyera, detrás de esa sonrisa juguetona y amabilidad irrespetuosa de Dimitri, había alguien que estaba inseguro todo el tiempo, alguien que quería amar y ser amado.

Pero...

Dimitri ya sabía que caesar no lo amaría.

Las marcas en los brazos de Dimitri son el recordatorio nato de que alguien puede aparentar ser feliz pero por dentro se hunde en la desesperación y la tristeza.

Las múltiples heridas que Dimitri hizo contra su propia persona son un recordatorio...el nunca será amado.

Y cuando se case con caesar...no será por amor, si no por obligación, como paso con su padre Alexis y lady Anna.

Cómo paso con el padre de caesar y su esposa muerta.

Cómo le ha pasado a muchas personas dentro del fino hilo de los {sergejev}.

Un hilo que está por romperse muy pronto por las decisiones del más nuevo jefe.

Dimitri estaba en su habitación encerrado nuevamente, Yuri, un alfa de ojos cafés afilados, cabello largo y café, estaba tocando la puerta— mi zarina...tiene que comer...no ha comido en dos días...las botanas no son saludables...— seguía tocando la puerta, hasta que dejó de tocar.

— dudo mucho que te haga caso...— dijo una voz conocida de mujer, ágata — lleva así desde que el zar trajo a ese omega....— se recargo de la pared mientras suspira levemente.

— si...ese omega es... exasperante...atacó al zar en su oficina! — dijo molesto.

— ¿..lo atacó..? Vaya que tiene los ovarios bien puestos...pero eso es solo un vil intento..— dijo la mujer, se acerco al alfa — y..? Que más .?

— bueno...el brillo en los ojos del zar esa...único...me pone triste ver que la zarina está así por culpa de mi jefe pero...no es el deber ser del Zar...— prosigue algo suspirante...

— te entiendo. Ang! El zarina merece algo mejor! Alguien que lo ame de verdad, ¿ No crees ? — pregunta.

— si...creo que si..— a Yuri se le ocurrió una idea — abellen!

— abellen..? Ah!! Abellen!! — ambos se fueron corriendo hacia la habitación del cocinero en la planta alta.

Ambos tocaron la puerta desesperadamente, y el beta abrió la parte de un tirón, tenía rulos en la cabeza para mantener su cabello rizo.

— ....no pienso preguntar. Abellen... Nesecitamos ayuda de.... Alexis..— dice levemente callado.

— no se hable más..justo estaba a punto de llamarlo — abrió la puerta para que el alfa de cabello café y la beta de cabello negro pasaran a la habitación — Alexis debe saber esto, aún que Dimitri se enoje conmigo...yo ya no puedo soportar un día más y ver sufrir a mi cachorro! — marco el número.

Hola.? Quien habla..?

Alexis... nesecito tu ayuda... Dimitri te necesita...— dice con decisión.




































Voy para allá...




































Capitulo tres listo, sean felices y saquen conclusiones...

Voten, y dejen sus comentarios.

Un Omega - caesar x Dimitri Donde viven las historias. Descúbrelo ahora