Habían pasado algunos días desde que Milk y Purple Yam se encontraron por primera vez, ambos en la búsqueda de un mismo objetivo, pero con distintos propósitos. Afortunadamente ambos llegaron a un acuerdo donde Milk no observaría cautelosamente a Purple Yam ya que este prometió no lastimar a Dark Choco.
Era una mañana muy agradable, los pajaritos cantaban en una linda melodía, la tierra olía bien gracias a que había llovido la noche anterior y no había más que tranquilidad en el ambiente.
Milk se encontraba preparando pan para desayunar junto a Purple Yam, Purple Yam por su parte estaba teniendo problemas para despertarse. Desarreglado y quejándose se levantó para sobrevivir otro día más junto a Milk. Él ya estaba harto de escuchar la estúpida historia de Dark Choco una y otra vez como un disco rayado.
Yam salió de su tienda de campaña para desayunar, encontrándose a Milk terminando de preparar unos sándwiches que hizo para ambos.
- Buenos días Yam, ven a comer algo para desayunar, debes estar hambriento. - Le dijo Milk con un tono dulce y tranquilo.
Los dos se miraron incómodamente por casi un minuto hasta que Yam asintió y fue a sentarse junto a Milk en un tronco. Ambos no dijeron ni una sola palabra mientras comían, Yam estaba demasiado tenso como para decir algo y Milk estaba concentrado en encontrar a Dark Choco.
Milk tomo un pedazo de su pan y empezó a escribir en una pequeña libreta, eso llamó la atención de su compañero.
- ¿Qué escribes? - Yam preguntó, levemente interesado en lo que Milk escribía.
- Estoy anotando los posibles lugares donde Dark Choco podría estar, ¿quieres ver? - El respondió feliz y animado por tener la oportunidad de hablar de su héroe una vez más.
Yam frunció el ceño al escuchar nuevamente ese nombre viniendo de la boca de Milk, si oía una palabra más relacionada con Dark Choco el explotaría. Con su ira comprimida él se fue del lugar, dejando a Milk solo en el tronco. A Milk esto le pareció bastante grosero.
Milk queria concentrarse en Dark Choco pero empezó a cuestionarse el por qué Yam estaba de tan mal humor, él normalmente era enojón, pero no era normal verlo tan irritado. El decidió que lo mejor sería hablar con él y esforzarse en comprenderlo, después de todo él no quería alejarse por no entenderlo luego de unas semanas. Terminó su pan y comenzó a ordenar todo con el fin de seguir con la búsqueda por Dark Choco.
Al terminar de ordenar él fue a buscar a su compañero, abriendo su carpa sin previo aviso. Yam se levantó de su saco de dormir rápidamente y tomo su mazo, apuntando directamente a Milk. El en respuesta suspiro profundamente y con el tono más amable posible le dijo que tenía que ordenar sus cosas para seguir buscando a Dark Choco.
- ¿¡Qué haces aquí!? - Yam alzó la voz, Milk le sonrió felizmente. - Tendremos que seguir con la búsqueda de Dark Choco. Te esperaré afuera. - Milk dijo atento antes de caminar fuera de la tienda de campaña y esperar a que Yam terminara de ordenar sus cosas.
Una hora y tanto después los dos ya estaban listos para irse. Milk estaba más que fascinado de estar buscando a su tan preciado héroe, Yam estaba listo para quebrarle el brazo apenas lo vea. - Bueno, ¿qué estamos esperando? ¡Vamos a buscar a Dark Choco! - Milk dijo emocionado, caminando con un paso bastante animado, Yam lo siguió mientras murmuraba como quería enfrentarse a muerte con ese tan mencionado héroe.
Un tiempo relativamente corto después ambos ya se encontraban caminando en dirección al sur, Milk no paraba de repetir que Dark Choco estaría ahí definitivamente.
Ninguno de los dos hablaba, solo si era necesario, Milk quiso romper el hielo tratando de no hablar sobre Dark Choco esta vez. - Se que estamos buscando a Dark Choco...- Yam frunció el ceño al escuchar ese insoportable nombre nuevamente. - ... Pero tarde o temprano llegaremos a Dragon's Valley, me pregunto si podremos derrotar a un dragón ahí. - La expresión de Yam cambió, él sonrió y dijo orgullosamente: - Yo puedo derrotar a un dragón hasta con mis puños! - Milk se mostró indiferente al orgullo de Yam, pero trato de alegrar la conversación con un pequeño chiste. - Solo si no te rostizan primero! - Milk soltó unas pequeñas risas, sin saber si Yam podría ser afectado por su chiste. Yam miró a Milk con enojo y hasta con odio. Ambos no volvieron a hablar en horas.
Horas más tarde ya eran las 6 pm, el sol se ocultaba y la luna aparecía nuevamente.
Yam se agacho y empezó a preparar su tienda de campaña. - Yam, que estás haciendo? - Yam algo estresado le contestó: - Instalándome, que no lo ves, imbécil?! - A Milk le enojó el insulto que Yam le tiró, el respondió con la ira que tenía en esos instantes. - Que no ves que hay una ciudad cerca?! Tenemos que ir a comprar comida y agua! - Yam se sorprendió bastante por la respuesta de Milk, pero en vez de calmarse se enojó aún más. - Ve a esa ciudad entonces! Yo me quedo aquí! - Milk suspiró con todo su enojo y se calmó. Él le dio sus cosas a Yam para que las cuidara mientras él iba a la desconocida ciudad.
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Junto a ti (Historia milkyam xDD)
AcakEsta es una historia que (no frecuentemente) estaré publicando aquí C: Como aquí incluiré algunos trastornos, prometo investigar sobre el tema, para no generar incomodidad a ninguno de mis lectores. Si cometo algún error o caigo en algún estereotip...