𝐎𝐑𝐐𝐔𝐈́𝐃𝐄𝐀𝐒 ▎𝐒𝐨𝐮𝐭𝐡 𝐩𝐚𝐫𝐤

𝕻𝐑𝐎𝐋𝐎𝐆𝐔𝐄 .

EL CUERPO DE LA LATINA DESCANSABA en la comodidad del asiento trasero del Jeep de su mamá, mientras la misma solo se dedicaba a mirar el techo de la camioneta blanca, pues no tenia mucho mas que hacer a decir verdad, mientras la ya antes mencionada jugaba con su anillo de color plata.

La chica de nombre KARLY
DANIELA MENDEZ, se estaba mudando a un pueblo que desnocia por completo, debido a temas que segun su madre CARLA MENDEZ no se debia preocupar, apesar de la irritable insitencia y dramatismo por parte de Kaly hacia el tema de su mudanza a un pequeño pueblo en Colorado.

Kaly se volvio a sentar cruzando los brazos viendo a su mamá por el retrovisor.

—¿Aunque sea puedes poner buena musica, mamá?—hablo Kaly, ya se le hacia molesto escuchar las canciones de Alejandro Sanz.

—Ya Karly, no es para tanto, ya vamos a llegar—dijo su madre sin quitar la vista de la carretera.

—lo mismo dijiste hace como 20 minutos—hablo Kaly, suspirando mientras tomaba su telefono del suelo de la Jeep.

—Si, pero ahora si estamos a punto de llegar—dijo su madre con una sonrisa—¿no te emociona, mi vida?

Kaly entre cerro sus ojos mientras fruncia el ceño dandole una muy obvia respuesta.

—Ay ya Kaly, quita esa cara—dijo Carla.

La joven solo desvio la mirada, en donde sus ojos cayeron vio su libreta rosa, donde apuntaba todo tipo de cosas, se apresuro a tomar la libreta estirandose lo mas que podia, asi agarrandola y abriendola, empezando a revisar cada pagina, encontrando experiencias en california, fotos y recortes, y alguna que otra cancion escrita por ella, las cuales notaba que se habian vuelto bastante malas ante sus ojos.

Sus dedos pararon de pasar pagina tras pagina, fruncio su ceño mientras sus ojos caian en la cancion 'Te mata' o eso decia arriba en la pagina 18, Kaly vio la letra de la cancion que la misma compuso con curiosidad, sabia que habia escrito esta cancion hace muchisimo tiempo, pero el transcurso del tiempo no habia cambiado su perspectiva de la letra y melodia de la cancion que tenia en su mente.

Era raro pensar que la cancion no habia perdido su magia, no era como todas las canciones que habia compuesto, las cuales al leerlas despues de 20 minutos de escribirlas, la aburrian, encambio eso habia sido diferente apesar de los probables meses de escribirla.

Ya veria que hacia con ella.

Los pensamientos de la chica fueron interrumpidos por su madre.

—Kaly, bienvenida a tu nuevo hogar—dijo Carla viendo el cartel la ventana izquierda.

Kaly quito su vista de su progenitora y volteo a ver la ventana izquierda, viendo un cartel de madera gastado, Kaly alzo la cejas al leer el nombre del pueblo.

—¿South park?—pregunto la chica alzando las ceja—suena estupido.

—¡Hey! Cuida tu forma de hablar—dijo su madre levantando su dedo indice.

—Lo siento—dijo Kaly sonriendo traviesamente.

Kaly veia a las personas que caminaban, algunas sin darle atencion al carro, otras volteando a verlo, Kaly solo sonreia a las personas moviendo su dedos a lo que estas no reaccionaban, solo se quedaban viendola fijamente y algo boquiabiertos.

Kaly reia divertida al ver su reacciones, mientras volvia su vista al frente.

—Ok, solo quiero saber, dejamos california, viajamos 17 horas, para vivir...—Kaly volteo y dirijio su mirada a la ventana—aqui...

—Un poco de aire fresco no te hara daño, linda—dijo Carla—parece un pueblo acogedor.

—Espero que los chicos no sean tan feos como el pueblo...—murmuro la joven.

—¿Que dices?—pregunto la mujer, ya que no pudo escucharla.

—Nada—hablo rapidamente la chica.

—...Y esta es la casa—dijo la mayor estacinando el carro.

Kaly volteo y vio la casa con una mueca, era una caja naranja con tejado negro, tenia dos pisos lo cual estaba bien, no nisiquiera bien, excelente para la latina, su madre ya saliendo del carro se acerco por detras para abrir la maletera, mientras ella seguia examinando la casa desde la comodidad de su asiento.

—¿Pero quien mierda pinta una casa de naranja?—se dijo asimisma, abriendo la puerta del carro.

Salio, y en ese mismisimo instante pudo sentir una rafaga de viento totalmente helado chocar contra su cuerpo, se abrazo asimisma mentalmente gritando gracias a el repentino cambio de temperatura.

Corrio la mas rapido que pudo para entrar a la casa, la cual hizo y al fin estremeciendose al sentir el calor del lugar, mirando cada esquina del lugar, obseevando los muebles ya instalados en la sala de estar y cocina, no iba negar que por dentro no se veia tan mal, sin para de ver a su alrededor, subio las escaleras y se encamino hacia el ultimo cuarto del pasillo, lo abrio a medias y examino el lugar, asintio levemente mientras murmuraba con aprobacion, era decente para tenerlo como habitacion, alzo los hombros para adentrarse.

Sonrio levemente, ademas parecia que su mamá habia planeado que este sea su habitacion, pues lo notaba al ver las paredes de un rosa suave y un gran armario, tenian una muy buena relacion madre he hija, ambas se apoyaban en todo lo que podian y se contaban de todo.

Talvez es por eso que se sintio tan frustrada al no notar que su madre no le queria decir la razon de su mudanza.

Quito eso pensamientos de su cabeza y se dirijio a la amplia ventana la cual tambien era un espacio para poder sentarse, ya que tenia unas almohadas ya puestas.

Se acomodo rapidamente y su vista cayo en un grupo de adolecentes pasando por el vecindario, ladeo la cabeza y se acerco mas a la ventana poniendo su manos en ella para poder ver con mas claridad a el grupo, notando que solo eran cuatro chicos, parecian hablar de su mudanza, ya que veian su casa y al mismo hablaban, pero sin detener su caminata.

Kaly noto como un rubio volteaba en su direccion, Kaly abrio los ojos levemente, pero rapidamente volviendolos a su tamaño normal, no queria actuar como una rara, "¿como carajos me noto?" Se pregunto asimisma, viendo como a todo el grupo voltear hacia su direccion.

Sonrio ante toda la atenciom que estaba recibiendo por solo ser la 'nueva', alzo su mano y la agito, saludandolos, mientras tres volteaban devuelta rapidamente, empezando correr, pero el rubio sonrio igual de confiado que ella y la saludaba con su cabeza, parecia tratar de verse atractivo o algo, Kaly rio al ver como un chico de Ushanka verde lo jalo de su capucha naranja para correr.

Tal vez este lugar no estaba tan mal, ¿verdad?