Lección 2: Sobre ella y él.

172 17 2
                                    


¿cómo podría definir mi primera vez? Nerviosa por supuesto, así me sentía estaba en la habitación de un hotel con un chico que apenas había conversado un par de cosas. Él parecía bastante informado de como funcionaba todo, estaba tan nerviosa que observé el piso todo el tiempo, entramos a un lugar donde la recepción era un enorme escaparate con un vidrio negro, lo cual me trajo tranquilidad no quería verle la cara a nadie era muy vergonzoso. Sasuke recogió una tarjeta y cruzo su brazo sobre mi espalda:

—Vamos, ¿qué? ¿estás tan nerviosa que no puedes hablar?— pregunto susurrándome al oído.

No pude responder. El sólo se sonrió como si disfrutará el verme así. Entramos a la habitación y el se alejó de mi, se quitó el bolso y lo dejó sobre un sofá, yo recorrí el lugar en silencio. Era una habitación con una cama doble, televisión y un pequeño sofá, la alfombra era muy gruesa y suave de color purpura, al igual que la manta de la cama, sus paredes eran gris o tal vez blanca no lo sé porque la luz era tan tenue que apenas si pude diferenciar, al costado de la cama había dos pequeños veladores, con una lámpara cada uno, un espejo de frente a la cama me inquieto:

—El baño está detrás de esa puerta— indicó Sasuke quitándose la corbata, su rostro pragmático y expresión fría era igual que la del salón.

—gracias— respondí nerviosa.

Deje mi bolso frente al pequeño arrimo frente al espejo, cuando sentí la presencia de Sasuke tras de mí, estaba con ese rostro de gigoló del parque, sonreía como si yo fuese una escena cómica.

—Realmente no sabes nada ¿verdad?— dijo burlándose. Antes de que pudiera responder se acercó a mí y sostuvo mi mentón mientras se ayudaba con su pulgar para separar aunque sea un poco mis labios, me quede inmóvil cerré mis ojos con fuerza y me aferré fuertemente al arrimo tras de mi:

—Espera un momento, tu expresión es horrible. Así no podría besarte ni un sapo.

—¿qué? — pregunté avergonzada.

—¿has tenido novio? — preguntó sentándose en la cama.

No sabía si responder realmente, me apenaba saber que él se haya acostado con medio tokyo y yo si quiera había tenido mi primer beso "francés" y precisamente con él:

—Sí— respondí revisando mi teléfono. Debía avisar en mi casa que llegaría más tarde.

—Oye, pon atención estamos a mitad de una clase—, insistió lanzándome un cojín que por suerte pude esquivar. Su voz era monótona y bastante seria, pero ahora lucía molesto.

—está bien, sólo avisaba a mi mamá—, respondí sentándome junto a él.

—¿cuantos novios has tenido?

—Sólo uno.

—¿hace cuanto?—, interrogaba acomodándose en la cama. Apoyo su brazo derecho en la cama y apoyo su barbilla en su mano, mientras que la izquierda la empuño contra su cadera quedando de costado junto a mí.

—en secundaria, último año— respondí un poco más relajada.

—Bien. ¿hasta donde llegaron?

—nos...nos tomamos de las manos y me beso un par de veces...—, respondí mirando hacia un costado.

—hm. ¿Te has tocado tu misma? Ya sabes con tus dedos— preguntó con un tono de voz ligeramente más profundo y juguetón.

—¿a qué te refieres? —, respondí confundida.

—¿qué es broma? ¿has visto porno alguna vez? ¿sabes cómo nacen los bebés?, ¿verdad? —, preguntó bastante abrumado.

—¡¿qué?! ¡Por supuesto que no! Y si lógico que se cómo nacen los niños, ¿vine a un interrogatorio o qué? —, pregunté totalmente avergonzada, sus preguntas eran demasiado complicadas y vergonzosas.

Susurros SecretosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora