Capitulo 10. Estoy enamorada de ti

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Presente, 2024

Una tormenta comenzó a caer de la nada, Claudia seguía caminando, aceleró el paso y por fin llegó a casa de la candidata del PRIAN, tocò el timbre pero no hubo respuesta, solo escuchó los maullidos de Leo, el gato.

-Abre, por favor. Es solo un minuto  - Fue el mensaje que Claudia le mandó a Xochitl en ese instante. Al parecer funcionó

-¿Claudia?, ¿Qué haces aqui? Està lloviendo, ven aqui - Dijo Xochitl

-Xochitl... yo... Espero no hayas mal interpretado las cosas es sòlo que... - Claudia simplemente era incapaz de articular màs de una frase completa y agradeció que Xochitl la interrumpiera.

- Claudia perdòname, tu no tienes que decir nada, sè que es mi culpa por haberme confundido, sè porque estas aqui y te quiero decir que lo siento mucho, mi intenciòn no era arruinar tu vida, jamàs lo fue. Olvida la carta y finjamos que esto jamàs pasò... ¿Claudia? ¿Por què me miras asi?

- Porque estoy esperando a que dejes de hablar para besarte,  ¿puedo?

Xochitl se quedó perpleja al ver que Claudia se acercaba cada vez màs a ella, esta vez no había nadie que las interrumpiera; entonces los labios de Xochitl se cruzaron con los de Claudia y compartieron el beso perfecto, era imposible negar su conexiòn. Ninguna de las dos sabìa explicar lo bien que se sentia estar juntas, por la mente de cada una pasaban mil recuerdos que jamàs olvidarían; por primera vez habían sido sinceras y no podrìan estar màs enamoradas. Xochitl le dio un beso en la frente a Claudia y entonces ambas se quedaron abrazadas en la sala, sin decir una sola palabra, simplemente escuchandose respirar.

-¿Qué me querías decir hace rato? - Dijo Claudia rompiendo el silencio

-Hace cinco minutos pensè que venías a advertirme que si me acercaba a ti habría consecuencias, pero ahora simplemente quiero saber qué pasó en Acapulco y ¿por qué desapareciste?

-Pero yo no desaparecí, tu fuiste la que rechazó mi pastel. Pensè que te habías arrepentido de haberme escrito esta carta.

-¿Pastel?, ¿Qué pastel?

- No sabía que decir y te mandè un pastel porque mi vuelo se había retrasado,  querìa avisarte que iba a venir para saber si estarías aqui

- Espera, yo rechacè un pedido de uber eats, nunca me imaginè que tú lo hubieras mandado, perdòname

- No te preocupes, Jesús seguramente ya se lo terminò

-¿Era necesario mencionarlo?

-Ay! ¿Está celosa candidata? - Claudia se mordiò los labios

-¿Celosa?, ¿de què hablas?

-Se que lo estas, pero ignora que Jesús existe

-No, no puedo ignorar el hecho de que estas casada, felicidades por tu boda, por cierto

- Xochitl, tu también estas casada. Te recuerdo que la boda fue otra idea tuya.

-Definitivamente eres la candidata de las mentiras, yo nunca dije que te casaras, solo dije que tuvieras una cita, una cita Claudia, no màs de 5 años de relación

- ¿Qué esperabas que hiciera? Tu desapareciste por mucho tiempo, volvimos a hablar hasta el velorio de Avelino - Respondió Claudia sin saber como manejar la situación

-Avelino, a veces lo extraño, fue un gran delegado. Incluso el sabía que me gustabas - Dijo Xochitl recordando el día que firmaron una carta cuando eran delegadas

- ¿Y cómo no iba a saberlo? Si le dijiste que nos habíamos enamorado en su delegación

-Casi lo había olvidado

- Xochitl, ¿en serio pensaste que nunca me daría cuenta que estabas enamorada de mi?. Para mi Xochimilco fue real

-Pensè que ese día solo estabas jugando, pero te mentí cuando dije que no sentí nada, porque desde ese día viví imaginando que era real

-¿Y por qué no me dijiste?

- ¡¿Qué podìa decir?!, después de que te despediste de mi cuando nos enteramos que ibamos a ser candidatas pensé que te había perdido para siempre.

-Xochi, ¿Esto es real? Porque ya no puedo perderte otra vez

-Si, es real Clau, estoy enamorada de ti y no puedo perderte tampoco. - Dijo Xochitl mientras le robaba un beso a Claudia.

-Yo estoy enamorada de ti, nunca dejaré de estarlo - Dijo con una sonrisa Claudia

- ¿Què vamos a hacer con esto? - Preguntó Xochitl

-Por primera vez no sè que hacer, no tengo idea. Pero definitivamente tenemos que esperar a que las campañas terminen.

-Claudia, esto va a ser imposible, no se què va a pasar

- No digas eso, calma, vamos a estar bien porque estaremos juntas. Solo que por mientras tendremos que esperar. Pero por favor, prometeme que ya no habrá más despedidas.

-Jamás me voy a volver a despedir de ti, no podría hacerlo.

-Deberíamos decirle a Maynez - Propuso Claudia

-¿Estas segura?

-De todas formas ya sabe y creo que puede guardar el secreto, si no fuera así, esa carta ya sería noticia nacional, ¿por qué le dijiste que me la diera?

-Después del ensayo del debate platicamos, pero fue algo arriesgado, simplemente confié en él.

El teléfono de Claudia empezó a sonar una y otra vez. Era Jesús.

-Parece que alguien te busca - Dijo Xochitl

-Le tendré que contestar, o si no pensará que algo esta mal

-Bueno - Saludó Claudia
-Claudia, mi amor, ¿estás bien? - Dijo Jesús al teléfono
-Si, mi vida. Apenas salí del aereopuerto
- Si quieres voy por ti, ya es tarde
-No, no te preocupes, le dije a Ernesto que me llevara a casa. - Mintió Claudia
-Lo que tu digas, amor. Aqui te espero
-Si, gracias corazón
Claudia colgó la llamada.

-Xochi, sabes que no me iría nunca, pero tengo que hacerlo

-Si, ya escuché.  Subete a la camioneta yo te llevo - Dijo Xochitl intentando ocultar sus celos

-No, ¿cómo crees? Es tardísimo, estaría loca si te dejo conducir a estas horas de la noche. Pediré un uber

-Clau, no te estaba preguntando. No voy a dejar que te vayas sola. Es más, tómalo como una disculpa por no haber aceptado tu pastel

-En ese caso, no puedo no aceptar tu disculpa. Gracias - Respondió Claudia mientras tomaba de la mano a Xochitl y se acercaban a la puerta para salir

Mientras Xochitl manejaba, Claudia se dio cuenta que ahi seguîa el sticker del corazón rosa que le había regalado hace años.

- No puedo creer que todavía tengas mi sticker, Xochi

- Jamàs lo quité, siempre me recuerda a ti, por eso no lo puedo quitar.

-A mi se me había olvidado que te ves muy bonita manejando.

Las mejillas de Xochitl parecían un jitomate de lo rojas que estaban y más aún cuando llegaron a un semáforo y Claudia le robó un beso.

-Clau, ¿sabes que podría darme la vuelta y no llevarte nunca a casa para que te quedaras conmigo?

-No lo harías

Xochitl dio vuelta a la izquierda en vez de seguir derecho

-¿Qué haces?! Jesús me espera - Dijo Claudia riendo

-Nada Clau, es broma. Pero de verdad me prometes que ya no nos vamos a despedir - Respondió Xochitl al tiempo que daba vuelta en un retorno lara seguir con el camino.

-Mi vida no tendría sentido si me despido de ti.










Futura presidenta (y su primera dama) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora