Ashes to ashes dust to dust ||Wriolette ♡

05.-

Sus manos tocaban la piel de Wriothesley con cuidado, como si estuviera tocando un recipiente de porcelana o vidrio, algo delicado.
Cuando sus ojos se encontraban Wriothesley inevitablemente se ponía nervioso, hacía lo posible por controlar sus emociones pero le complicaba, quería seguir mirando esos ojos pero no quería que notara lo que estaba pasando. Neuvillette no era tonto pero de momento no había notado lo que sentía por el.

—¿Cuánto falta?

—Creo que pararemos en un campamento.

—¿Seguiremos juntos?

—¿Por qué no lo estaríamos?

Wriothesley suspiró cansado.

—No te separes de mi.

Juntos caminaron de la mano, al bajar del auto Wriothesley lo ayudó para que no tuviera que hacer esfuerzo, sin darse cuenta quería hacer cosas como si estuviera coqueteandole a un interés amoroso.

No soltaron sus manos incluso si los demás lo veían mal, Wriothesley no reconoció el lugar lo que le pareció extraño pues siempre que iba a un campamento mínimo reconocía los trajes pero todo era distinto además muchos parecían conocer a Neuvillette y tenerle cierto respeto.

—¿A dónde vamos?

—Nos quedaremos un tiempo, ¿Te parece si dormimos juntos? No será en la misma cama pero tengo un lugar para mí, ya he estado aquí antes.

—¿Podemos estar juntos?

—Si, puedes ponerte cómodo, hay un mueble para que puedas escribir y bueno, la cama no es nada cómoda pero es mejor que dormir en el piso.

—Está bien, muchas gracias ¿Dónde es?

Neuvillette sonrió incómodo.

—¿No lo ves? Es aquí.

Wriothesley miró hacia todos lados hasta que volvió a entender que estaban en la guerra, en un campamento de guerra, fué un iluso al pensar que de verdad habría una habitación, la habitación a la que Neuvillette se refería era nada más una tienda con dos camas de metal, oxidadas y sobre una tela para que no fuera un piso completamente de tierra.

—¿D-dónde me puedo dar un baño? No es necesario que sea la gran cosa solo quiero limpiarme un poco. 

—Hay duchas pero no son como te imaginas, conozco un lugar un poco especial si quieres más privacidad.

—¿En serio? —Preguntó emocionado.

—No, no es para nada privado pero es agradable.

—Vamos.

Cada vez se sentía más sorprendido, Neuvillette lo guió a un lugar alejado, un lago.

—¿Es esto?...

—Me he bañado aquí un par de veces, es mejor cuando es de noche, puedes venir solo di que te envié a buscar algo y te dejarán. Es más bien para relajarse que para limpiarse.

—Ya veo... quizás lo haga.

—Hazlo, cuando estás solo es muy agradable.

Su voz se volvió suave, el ambiente era diferente al hospital y Wriothesley se sentía amenazado, por alguna razón sentía que estaba en un lugar en el cual no debería estar. En ningún momento nadie los detuvo, nadie le preguntó quién era, nadie lo miró directamente a los ojos, todos los miraban cuando Wriothesley les daba la espalda, ese lugar era aterrador incluso para alguien como el.

Cuando empezó a anochecer Neuvillette encendió una pequeña lámpara en la tienda, hacía frío pero parecía no afectarle, Wriothesley se sentó en lo que sería su cama pero no tenía ganas de dormir, no podía hacerlo en su mente habían un montón de cosas, preocupaciones y pensamientos.