-NO EXISTE UN GÉNERO - LPDM

Una pequeña visita

- Que chico tan raro - Decía para si mismo Skipper - Iré a visitar a Marlene.

Camino hacia donde se encontraba su amiga, tenía cosas que contarle,
además ella siempre le ayudaba a desahogarse de sus problemas.

Hablar con la nutria era insoportablemente relajante, siempre le daba tranquilidad poder estar con alguien de confianza como ella. Era como una hermana más, que le proporcionaba consejos y lo hacía sentir mejor.

Normalmente solía ir solo cuando tenía algún problema, pero está vez era diferente, iría a platicar de cosas triviales nada más, o tal vez comer algo. Un plan lo más alejado del 'Trabajo', solo pensar en sus problemas le traía dolor de cabeza.

Llegó rápido a la casa, pues no estaba tan lejos; tocó la pequeña puerta que tenía el recinto. Y después de unos minutos se escucho como la abrían, Marlene sin estar extrañada lo dejo pasar.

- Buenas noches Skipper, que se te ofrece? 

- Estrés Marlene, Demasiado estrés.

- Pasá y cuéntame lo que ocurre.

Entro y se sentó en uno de los glaciares artificiales en forma de banquitos. No eran los más cómodos, pero servían en ocasiones como estás.

las visitas de el pingüino la entretenían, pues siempre tenía algo que contar.Era obvio que lo hacía para ayudarle, no porque le gustara escuchar los chismes de la vida de su amigo, claro que no.

- Últimamente a habido confusiones en cuanto a la orientación de cada uno. La guía dice que solo hay tres hombres;pero en cuanto a nuestra biología he deducido que ninguno de nosotros es, bueno, tu sabes, Chica.

- Mmm,que situación tan complicada- decía mientras frotaba su aleta contra su cara mientras pensaba - Creo que lo mejor sería que se hicieran pruebas de sangre.

- Ya las hemos hecho, ahora mismo Kowalski las revisa en su laboratorio.

- Entonces no sabría decirte exactamente que hacer, tendrán que resolverlo ustedes; lo siento.

- Gracias por tu ayuda, que pases linda noche.

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Regresaba desanimado a su recinto, dormiría o le pediría a Mort un Smoothie de frutas.

No entendía el por qué lo quería tanto, lo amaba pero no era correspondido, por qué?

Siempre le mostraba su afecto, le regalaba cosas que encontraba por ahí. Incluso lo había invitado a una fiesta! Pero nunca fue, lo espero pero no llego. Era una amargado.

- Todo Madagascar me ama, bueno menos los fosas, pero por qué no puedes amarme tu a mi? - Frustracion y tristeza era lo que sentía, sufría por dentro. Moría de ganas por pasar algún momento juntos, simples ilusiones, él nunca aceptaría salir con el ni aunque fuera el rey.

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430 palabras
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Es cortito pero no tenía inspiración,sacaré más capítulos. Se los prometo.