Alex y Chiara son mellizos.
Al cumplir sus 12 años, fueron separados.
Chiara se quedó con Emma, su madre, y Alex con Josep.
Ambos se reencuentran en un funeral, su padre ha muerto. Ahora, luego de 3 años sin verse, deben volver a vivir juntos.
Hoy era el primer día de mi melli en el instituto y tenía miedo de como se iba a llevar con mi grupo de amigos.
–Chacho Alex, venga ya, tardas un montón– dije mientras aporreaba la puerta del baño.
–¡Qué ya voy!– chilló mi hermano desde dentro del baño.
–¡ALEX OLIVER, SON Y MEDIA!– chillé de vuelta.
–¡HOSTIA, ¿PERO TÚ NO AVISAS?!–
–¡SAL DE UNA PUTA VEZ, ALEX!–
Unos segundos después salió del baño un Alex, el cual iba sorprendentemente bien vestido.
–¿Y ese milagro?– pregunté.
–¿De qué hablas?–
–Te duchaste y te vestiste sin parecer un vagabundo, estoy flipando– bromeé.
–Ja, ja, ja. Tira, que vamos a llegar tarde–.
Lo que me faltaba ahora es que el mongolo este me metiera prisa.
ALEX
Estaba muerto de miedo.
Hoy empezaba en el instituto de Kiki y tenía miedo de no encajar o de quedarme solo como había ocurrido el año pasado.
Luego de que la pesada de mi querida hermana casi se cargara la puerta del baño a golpes, salí.
Me había vestido decentemente. Decidí subir una foto de mi outfit a Instagram.
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@loquillodemiprincesa 💙💥
CHIARA
Ya era la hora.
ALEX
Ya era la hora.
CHIARA
–Loquillo, pilla la mochila que nos vamos– le dije a mi hermano.
–Vale, princesa– respondió.
Después de caminar 15 minutos hacia el instituto, llegamos. En medio del patio estaba mi grupo, sentados en el banco de siempre.
Según me vio, Rus vino corriendo a darme un abrazo.
–¡KIKIIIII!–
–¡RUSLALA!–
Ambas nos sumergimos en un abrazo de esos que un poco más y te sacan las costillas.
–Hola, Rusli– dijo tímidamente mi hermano.
–¡ALEXITO, ¿QUÉ HACES AQUÍ?!– chilló la loca de mi mejor amiga mientras se tiraba a los brazos de mi melli, el cual recibió el abrazo correspondiéndole.
