Sweet Sweet Home (RivAri)

Semana 3

-Yo discrepo ‐Molly se cruzó de brazos‐ puedo darte muchísimas razones del por qué tu opinión está completamente errada.

-Ambos sabemos que no hay ninguna razón lógica para decir que mi opinión es errada ‐Ama imitó la acción de la mexicana.

Rocio miraba desde lejos la discusión de Molly y Ama mientras esperaban a Samantha y Emma en el estacionamiento del edificio.

Hoy las cinco habían decidido tener un día de distracción fuera del departamento ya que el paso de los días lejos de Abril estaban empezando a hacer peso sobre ambas Rivera.

El plan fue ideado por las tres amigas de la rizada, con algo de ayuda de Abril a través de mensajes y consistía en compras en el centro comercial más cercano, un almuerzo en cualquier lugar con la única condición que fuera comida chatarra, un paseo por el parque y, sólo porque el clima estaba calido, cerrarían su plan yendo por helado.

Rivers, muy al contrario de lo que todas creyeron, acepto la idea sin ninguna objeción.

Ella y Em no habían estado a más de unos metros del departamento desde la ida al supermercado. Y no es que Samantha no quisiera tener un paseo con Emma como los que la pequeña tenia siempre con Ari, pero entre todas las cosas que debía hacer en el departamento y el cuidado de la pequeña ojiverde ¿En qué momento se hacía un espacio para salir a pasear? Ese era un punto que aún no lograba resolver.

Algunos minutos después la semi rubia salió por las puertas del edificio cargando a una Emma muy sonriente en un brazo y con la pañalera colorida de la pequeña colgando sobre el hombro contrario.

Al llegar al lado de Rocio no pudo evitar prestar atención a la tensa discusión que mantenían sus amigas.

-¿Y ahora qué? ‐Preguntó la ojiverde mirando en dirección a las dos chicas.

-Siguen con la discusión de ayer. ‐Respondió Rocio mirando en la misma dirección.

-¿En serio? ‐La rizada suspiró‐ Supongo que es hora de actuar como madre.

Samantha se acercó hasta las dos escuchando la discusión de más cerca. Ambas chicas ya se notaban molestas y acompañaban sus palabras haciendo gestos con sus manos.

-¡Claro que no, travesti idiota! ‐Exclamó enojada Ama.

-Wow, wow, ¡tranquilas! ‐Interrumpió la rizada‐ esta discusión ya se está volviendo agresiva, se calman.

-¡Pero... ‐Dijeron las dos al unísono, dirigiéndose una mala mirada cuando se dieron cuenta que ambos hablaron al mismo tiempo.

-"Pero" Nada. No pueden insultarse solo por tener una opinión distinta, ¿Que clase de ejemplo le quieren dar a Emma? ‐Molly iba a hablar pero Rivers no se lo permitió‐ No, Molly. Creí que ayer había quedado todo arreglado entre ustedes.

Ama abrió la boca para hablar pero esta vez fue Em quien la hizo callar llevando su dedo índice a sus labios soltando un suave "shhhh", acción que aprendió estos últimos días luego de las dos semanas de convivencia con Rocio.
Rivers reprimió una risa por la acción de la pequeña y continuó.

-Gracias, Em. Eso estuvo muy bien ‐halago a Emma quien rápidamente se sonrojó.

Molly y Ama mantenían su mirada baja mientras Samantha hablaba y Rocio admiraba con gracia la escena desde más atrás.