Semana 1

471 33 3
                                    

-¿Su ropa de abrigo?

-Tercer y cuarto cajón.

-¿Y sí ensucia su ropa?

-Lo cambias y luego lavas la ropa.

-Ajá... ¿Cómo lavo su ropa?

-En la lavadora, las indicaciones están ahí.

-¿Cuanto jabón se usa?

-Lo dice en las indicaciones.

-¿Donde están las indicaciones?

-Anotadas en la lavadora.

-Ahh.. y ¿Su ropa de abrigo?

-Presta atención Samantha, ¡Eso ya me lo preguntaste! ‐Dijo Abril riendo.

-Lo siento, estoy algo nerviosa... ¿Y si la pierdo? ¿¡Has visto su tamaño!? Es muy pequeña y el departamento muy grande y...

-Samy amor, respira tranquila ‐La Interrumpió la ojimarrón cuando la respiración de Rivers se aceleró‐ Va a estar todo bien, sabrás que hacer y cuando no puedas resolver algo me llamarás y te ayudare. Y no vas a perderlo amor, Emma aún no es lo suficientemente rápida para huir sin que la veas. ‐Dijo Ari mientras se acercaba a abrazar a la semi rubia‐ Son solo unas semanas ‐Agregó luego de besar a la ojiverde‐ ¿Crees que puedes llevarme al aeropuerto o pido un taxi?

-Te llevo, hay muchas preguntas más que puedo hacerte en el camino.

-¿Sabes? Creo que ya había llamado a un taxi...

-Ariiiiii‐Interrumpió Rivers haciendo un dramático puchero.

-Esta bien, vamos.

————————🏡🏡🏡————————

Cualquiera diría que después de horas de preguntas, la semi rubia ya tendría todo muy claro pero Abril confirmó que esto no era así cuando las preguntas continuaron aún más intensamente durante el camino al aeropuerto.

La ojimarrón sabía que Samantha estaba siendo un tanto dramática, confiaba totalmente en que iban a sobrevivir cuatro semanas sin ella y en el fondo Rivers también lo sabía... pero eso no quitaba el hecho de que tenía miedo.

Abril se había asegurado de enseñarle absolutamente todo lo que tenía que saber para el cuidado de la pequeña ojiverde, además había repartido notas por toda la casa y su teléfono estaría a su lado todo el tiempo por si Sam necesitaba algo.

Al llegar al aeropuerto, la rubia no podía decidir cuál de las dos Riveras estaba más apegada a ella. Emma no la había soltado desde que se bajaron del auto y Rivers no estaba en mejores condiciones.

-Amo sus abrazos, amores, pero voy a perder mi vuelo ‐Dijo en tono triste llamando la atención de ambas‐ Vamos mis niñas, no quieren hacerme llorar, ¿O si?

-¿Si lloras entonces te quedaras? ‐Preguntó Rivers liberando su agarre de la cintura de la ojimarrón.

-Me temo que no Samy ‐Dijo imitando el puchero de su esposa‐ Emma, ve con Mamá ¿Si? ‐Intentó soltar el agarre de la bebé quien sólo se soltó cuando escucho a Samantha llamarla a sus brazos‐ Cuídala, aún es pequeña y hay muchas cosas que no sabe y debe aprender.

Sweet Sweet Home (RivAri)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora