La debilidad de Miércoles-Miércoles x Tn

2-El bosque

Miércoles estaba mirando fijamente a la mujer quien tenía los ojos brillantes. Al mirar un segundo al suelo, vio que estaba flotando, pero su cara no cambió ni un ápice. Volteó de nuevo a mirar a la mujer para esperar a ver que le contaba.

—Tienes un poder...sorprendente...puedes ver la oscuridad y la maldad...eres un...—pero no pudo terminar porque fue la propia Miércoles quién le dijo.

—Cuervo, sí, mi madre me lo dijo hace tiempo.

La mujer le esbozó una ligera sonrisa.

—Exacto—dio un pequeño aplauso—pero no has sabido desarrollar tus poderes. Y eso es porque...a las personas como tú les entrenan los muertos—esa última frase lo dijo en un tono que helaría la sangre a cualquiera—y sin el debido entrenamiento...acabarás muerta y tu alma vagara por toda la eternidad en este mundo.

—¿Y tú vas a entrenarme?—preguntó ella.

—Si, eres un diamante en bruto. Y el lugar te necesita.

La pelinegra no se terminaba de fiar de ella, pero su intuición le decía que no era una mujer malvada, presenciaba en su interior algo de oscuridad, pero era de rabia...de ira...por no poder abandonar el lugar. O eso era lo que le decía su intuición.

—He visto a esa chica—dijo—¿qué relación tiene con este lugar?.

—Oh, pues...no lo sabemos con exactitud—esa respuesta la decepcionó.

—¿Por qué?—preguntó moelsta.

—Ella ya vagaba en este lugar antes de nuestra llegada...su corazón...es negro...su maldad...es infinita...asusta a la gente que le parece algo curiosa o capta su interés—respondió—lo único que sabemos es que algo la ata a este lugar y creemos que ha sido expulsada del mismísimo infierno.

—Lo dudo, es solamente un fantasma que tenemos que expulsar y listo

—Miércoles, no debes subestimar a esa chica...tiene poderes que no conoces...ten cuidado...Miércoles Addams...—dicho esto, las sillas bajaron hasta tocar el suelo de manera suave y lenta.

Después de eso, la mujer desapareció por completo. Ella escuchó un sonido, eran Cosa quien estaba algo aterrado.

—No temas, ya hemos enfrentado a un hyde, un muerto que volvió a la vida...esto es solamente encontrar su punto débil—dijo mientras se iba a cambiar para ir al club de esgrima.

Todo fue normal en las siguientes horas, ella luchó con Bianca y otros alumnos nuevos que demostraron tener cierto nivel aunque obviamente no llegaban a los de ellas dos. Se dio una buena ducha y ya cambiada salió a dar una vuelta, preguntándose si se toparía con esa chica.

Pero nada de eso sucedió. En cambio, se topó con Tn quien estaba examinando unas herramientas de jardinería que habían llegado. El chico se dio cuenta de su presencia al cabo de poco y le saludó.

—¿Sabes donde puedo encontrar información de este lugar?—él volteó y le esbozó una pequeña sonrisa.

—¿Tanta curiosidad por una isla?

—Yo lo veo más como una prisión, seguridad a cambio de aislarse.

El chico dejó las herramientas a un lado.

—No lo sé, no he encontrado nada en internet, aunque yo creo que borraron el rastro para evitar que alguien sepa de este lugar. Quizás en la biblioteca haya algún libro—guardó unas tijeras y pequeños útiles en una caja—lamento no serte de ayuda.

—No voy a andarme por las ramas, seré directa...¿has visto a una chica rubia y bien vestida?—el chico volteó, y por su cara, parece haber dado en el clavo—la has visto.