Ethan:-Es un plan excelente -digo en la habitación, de pie, con un chasquido de dedos.
-¡¿De verdad?! -Sophie, recostada en su cama, pregunta con cierta emoción.
-Por supuesto -afirmo de brazos cruzados, apoyando mi espalda en la pared-. Me voy a caminar por ahí -digo separándome de la pared-. Estar encerrado, es algo que no soporto.
Salgo de la habitación de Sophie, y bajo las escaleras. Pensar en el plan de Sophie, es lo único que soy capaz de hacer mientras camino a la puerta.
-¡Ethan! -el llamado de Sophie, que está de pie en las escaleras, me detiene, justo cuando estoy a punto de abrir la puerta.
-Es hora de ejecutar el plan -dijo, con una sonrisa se formada en sus labios.
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Lux:
-¿Qué pasa ahora? -pregunto enojada, con brazos cruzados sobre mi pecho.
-¡Oye! -Exclama Lidia-. No me hables así.
«No puedo creer que esta bruja tenga la dichosa necesidad de enviarme a hacer deberes. Todo está impecable, y aún así, siempre me jode la vida».
-Ya voy a hacer los deberes -afirmo con la cabeza gacha, dando dos pasos para coger los artículos de limpieza que están frente a mí.
-¿Deberes? -dice y se cruza de brazos-. No te he enviado a hacer deberes -su voz es gélida.
-Entonces ¿a qué has venido a mi habitación? -levanto mi mirada, antes perdida en el suelo. Frunzo el ceño.
-Llegaron personas en busca de una niña que adoptar -afirma Lidia.
-¡En serio! -levanto mis manos, y cubro mi boca por la sorpresa. Los artículos de limpieza que sostenía, cayeron desplomados al suelo-. Pero, pensé que no me ibas a avisar si esto pasaba -paso los brazos a mis costados-. Como soy la que hace los deberes, no creía que me tuvieras en cuenta para algo así -mi mirada cae al suelo nuevamente.
-Mira, Lux. La verdad, antes no te tenía en cuenta para esto -dice Lidia. Con un brazo a sus costados, y la otra mano, acariciando su barbilla- Pero, desde que escuché las palabras que te dijo Dayana. Desde que escuché que lloraste mucho, estuve esperando que alguien llegara para darte esta oportunidad -sus palabras me hieren mucho-. Así que, vamos -me extiende una mano-. Están esperando allá abajo. Ya sabes, para la selección
«Dice que ¿tuvo que escucharme llorar para aceptar que yo sea adoptada? Esta mujer es una cínica».
-Yo puedo ir sola -rechazo la mano que extiende Lidia, dándole una palmada con el costado de mi mano. Le paso por el lado, y me quedo parada frente a la puerta que conduce al pasillo-. Pero antes de irme, debo preguntar algo -me giro para darme cuenta que Lidia me está mirando.
-Pregunta lo que quieras -dice, con sus manos, acomodando su ropa.
-¿Por qué yo? -observo como Turner frunce el ceño-. Voy a repetir la pregunta. Esta vez, con más precisión para que entiendas -mis ojos entrecerrados, reflejan en mí, una gran seguridad-. ¿Por qué yo era la única a la que tratabas mal? -una lágrima traza su camino en mi mejilla-. Existían más personas y solo fui yo -tengo la voz rota, al igual que los sentimientos-. ¿Sabes qué? -digo, limpiando mis mejillas-. Me alegro que haya sido así. No quisiera imaginar a otra persona en mi lugar, porque esto, no se lo deseo a nadie -su mirada es repugnante-. Espero que me elijan. Estar aquí, es algo que no soporto -con todos mis pensamientos expresados, salgo de la habitación, cerrando la puerta con mucha fuerza.
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Lux
Fantasy¿Alguna vez has mirado el firmamento para contemplar las estrellas? ¿Qué tan difícil es que lo hayas hecho? Lux es una adolescente que siempre se anida en la nostalgia de su brillo. Siendo una huérfana desde muy temprana edad, Lux fue criada en un o...