La Ciudad de México se extendía ante ellos como un tapiz de luces y sonidos mientras Sergio y Max recorrían sus calles en un elegante coche negro. El conductor, asignado por Max, los llevaba por avenidas llenas de vida nocturna, donde la energía vibrante de la ciudad parecía alimentar su creciente emoción.
Max había sugerido comenzar la noche en un lugar especial, un bar en una azotea con una vista panorámica de la ciudad. El ambiente allí era sofisticado pero relajado, perfecto para seguir conversando y disfrutando de la noche. A Sergio le sorprendía cada vez más como Max conocía mejor esta ciudad que el mismo, aunque era comprensible, él llevaba viviendo ahí solamente unos cuantos meses y muchas veces el trabajo no le permitía salir a divertirse.
Al llegar fueron recibidos por un anfitrión que los llevo a una mesa reservada en la esquina donde la vista era increíble. Las luces de ciudad brillaban como estrellas caídas, y la música suave llenaba el aire. Sergio se sintió envuelto en una atmosfera llena de posibilidades infinitas.
–Este lugar es impresionante.– dijo Sergio admirando la vista mientras se sentaba.
–Sabía que te gustaría. Aquí es donde suelo venir cuando estoy de visita en la ciudad y necesito un respiro.– Max sonrió complacido.– Esta ciudad tiene una forma especial de calmarme y, al mismo tiempo, inspirarme.
–Lo entiendo perfectamente. A veces necesitamos un lugar así, un refugio del ajetreo diario.
Después de pedir unas bebidas, la conversación retomó un tono más relajado. Hablaron de sus pasatiempos, de sus gustos en música y cine, compartieron anécdotas de sus vidas. Sergio descubrió que Max tenía un sentido del humor único y una risa contagiosa, algo que no había esperado de alguien que se dedicaba a la política. Mientras más conocía al rubio más sorprendido quedaba.
–¿Alguna vez pensaste en dejar la política?– pregunto Sergio en un momento, curioso por saber más sobre las ambiciones personales de Max.
–A veces.– Max se quedó pensativo por un instante.– La política es agotadora y puede llegar a ser desalentadora algunas veces. Pero siento que tengo una responsabilidad. Hay tanto que se puede cambiar y mejorar, y quiero ser parte de eso. Sin embargo he aprendido que es crucial encontrar un equilibrio, y por eso tengo lugares como este.
–Me parece admirable. Yo también trato de encontrar ese equilibrio aunque a veces es difícil.
–Lo sé. Pero creo que todos necesitamos algo que nos haga sentir completos fuera del trabajo. Quizás eso es lo que estamos empezando a encontrar este noche.
Antes de que Sergio pudiera responder, sus bebidas llegaron y ambos brindaron por la noche y las nuevas oportunidades que traía consigo.
–Entonces, Max,– dijo Sergio después de tomar un sorbo de su bebida.– dijiste que querías mostrarme más de la ciudad. ¿Qué sigue en nuestro itinerario?
Max sonrió, sus ojos brillaron con una chispa de emoción ante las palabras de Sergio.
–Tengo un par de sorpresas planeadas. Pero antes de seguir, quería hablar un poco más sobre algo que mencionaste antes. Dijiste que tu empresa está buscando entrar más a fondo en el mercado europeo. ¿Qué tienes en mente exactamente?
–Ha sido un año un tanto complicado. Hemos tenido éxito expandiéndonos a otros mercados pero para Europa ha sido diferente pues la economía ha afectado nuestros proyectos de sostenibilidad, y algunas inversiones no han dado los resultados esperados. Estamos buscando nuevas oportunidades y alianzas para poder continuar con los proyectos de la empresa.
– Entiendo.– Max asintió reflexionando por un momento.– En mi experiencia, las alianzas estratégicas pueden ser clave para superar tiempos complicados. Tal vez podamos explorar algunas formas de colaboración entre nuestras respectivas áreas de influencia.

ESTÁS LEYENDO
National Anthem (Chestappen)
FanfictionUna historia de amor prohibido y pasión desenfrenada, ambientada en un mundo donde el dinero y el poder dictan las reglas y donde los corazones valientes se enfrentan al desafío de seguir sus propios deseos, incluso cuando eso significa desafiar al...