5. Eres tan hermoso

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Max se instaló rápidamente en su lujosa suite del hotel Waldorf Astoria. Después de un largo vuelo lleno de documentos por revisar y trabajo, decidió relajarse un poco y prepararse para la noche. Había preparado algo especial para Sergio con ayuda de George, una cena íntima en uno de los restaurantes más exclusivos de la ciudad.

Tomo una de las botellas de vino que se encontraban en la suite y se sirvió un poco en una copa para después salir a la terraza y disfrutar de la vista. Poco después George se le unió.

─Max, aquí están los contratos de confidencialidad que pediste.─ George le entrego una carpeta y tomo asiento en el sofá─. Y no olvides tu cena con Sergio, ya confirme la reserva en Le Bernardin a las 8.

─ ¿Estás seguro que es un buen restaurante?

─Por supuesto.─ respondió George sonriendo orgullosamente─. Cuenta con 3 estrellas Michelin, sabes que siempre busco las mejores opciones para mi jefe querido.

─Gracias, George. Eres un salvavidas, como siempre.─ dijo Max mientras jugaba con su copa.

─ ¿Estas nervioso por la cena?

─Un poco, no he visto a Sergio desde que regrese de México, he hablado con él pero no es lo mismo. Quiero que todo salga perfecto.

─Estoy seguro de que todo saldrá bien.

Max pasó el resto del día ocupándose de sus asuntos, necesitaba mantenerse despierto para vencer el jetlag, además de que temía que si tomaba una siesta podría perderse la cena con Sergio.

Después de unas cuantas horas, finalmente llegó la hora de prepararse para la cena. Eligió un traje oscuro y elegante, consiente de la importancia de causar una buena impresión.


En el apartamento alquilado de Sergio, la atmosfera era de emoción. Paola estaba ayudando a Sergio a elegir su atuendo, mientras Carlos y Patricio revisaban algunos detalles del proyecto.

─Checo, tienes que verte espectacular.─ dijo Paola mientras sostenía varias opciones de camisas─. No puedes usar cualquier cosa.

─Lo sé, lo sé. Estoy tratando de no parecer demasiado nervioso.─ respondió Sergio, finalmente eligiendo una camisa blanca y un traje azul marino.

─Te verás genial, confía en mí.

─Gracias Pao.─ Sergio sonrió ligeramente─. Y una vez más perdóname por dejarte sola en la primera noche.

─Por mi no te preocupes, ya veré que hacer.─ respondió Paola acomodando el cuello de la camisa de Sergio─. No pienso quedarme encerrada aquí toda la noche.

─ ¿Qué piensas hacer?

─No lo se aun pero algo se me ocurrirá.

Poco antes de las 8 p.m., un auto llegó para recoger a Sergio. No podía evitar sentirse ansioso mientras se dirigía al restaurante. Había mucho en juego esa noche y quería que todo saliera perfecto.

Cuando llegó a Le Bernardin, un elegante restaurante conocido por su exquisita cocina francesa, Sergio fue recibido por el personal y llevado a una mesa privada donde Max ya lo esperaba. Max se levantó para recorrer la silla frente a el par que Sergio pudiera tomar asiento.

─Sergio, que gusto verte.─ dijo Max mostrando una cálida sonrisa─. Gracias por aceptar mi invitación.

─El gusto es mío, Max.─ respondió Sergio tomando asiento─. Este lugar es increíble.

La cena comenzó con una serie de platos finamente preparados, cada uno más delicioso que el anterior. La conversación fluía fácilmente, con ambos hombres compartiendo sus novedades y riendo juntos. Era evidente que había una conexión especial entre ellos, algo que iba más allá de lo laboral.

National Anthem (Chestappen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora