Los Oakshine eran los poderosos hechiceros de la sangre, capaces de destruir a su paso todo y cuanto desearán poseer.
Con la sangre más poderosa de los siete reinos junto con los Targaryen y su fuego.
Las alianzas entre estos dos reinos se remontaban muchísimos años atrás.Actualmente el rey Vandever Oakshine estaba sorprendido por la reciente invitación para pedir la mano de su hija pequeña, Aerin.
Conocía a los Targaryen desde muchas generaciones atrás, antes de el, su padre, abuelo y tatarabuelo le contarían sobre sus más valiosos aliados...La sangre es más poderosa con el fuego hijo mío... se encargaban de repetirle su padre y abuelo.
Sabia que su hija Aerin era codiciada en los siete reinos por su belleza e inteligencia incalculable.
Varios idiomas eran entendidos por la princesa, desde el antiguo Alto Valyrio, bajo Valyrio, Dothraki y el Skroth.La princesa Aerin era la princesa más hermosa de los siete reinos, no había una princesa mas bella e inteligente salvo ella.
El rey sabía que todos los reinos ansiaban una alianza con los Oakshine más concretamente con la última de sus hijas. Pero sin embargo el no estaba dispuesto a dar su mano a cualquiera. Cualquier rey hubiera entregado en mano a su hija por una gran suma de dinero o víveres para el reino, sin embargo el rey Vandever sabia lo que valía su familia. La felicidad era lo más importante. Ya que la familia Oakshine poseía el poder de la sangre, este no era efectivo sin lazos reales. Tenían que perseguir la conexión y magia para que su poder fuera poderoso y fuerte.El rey sonrió felizmente. Conocía a Rhaenyra de una fiesta hace tres meses, una boda se celebraba en el reino venidero. Le había parecido encantadora, fuerte, carismática, bondadosa pero intimidante y fuerte. Su aroma a incienso intenso y azufre picante no paso desapercibido para el rey y supo entonces que estaba ante la única candidata para desposar a su última hija. No se presentó, pues ella vino directamente a presentarse con una reverencia perfecta y admiración palpable, supuso entonces que ya lo conocía y le agrado aún mas.
-Mi señor, rey Vandever Oakshine es un honor estar ante su presencia. - Una postura perfecta recta, alta y magnífica y una reverencia se hacían presentes.
-Rhaenyra princesa y futura heredera del trono de hierro y los siete reinos, el placer es mío querida.
-Me honra saber que está de mi lado alteza.
-La familia Oakshine siempre estará de parte de la familia Targaryen. Lo demostraremos por siglos hasta que todos desaparezcamos. Aún que con nuestra unión eso es casi imposible, verdad? Los domadores de la magia, dragones, fuego y sangre... Únicos en este reino.
Rhaenyra le sonreía con complicidad. El rey portaba un aroma en particular que hacía a sentir a la princesa en casa donde perdía horas en el jardín con su difunta madre. Rodeada de rosas rojas.
Después de vagar en el recuerdo de su primer encuentro con la heredera Targaryen el rey Vandever fue a buscar al herudio real para pedirle enviar una carta de regreso al reino Targaryen, Rocadragón. Comunicándole a la princesa Rhaenyra su aceptación al cortejo de mano de su querida hija Aerin.
Fue entonces a buscar a su hija para informarle del acontecimiento.
El palacio de Oakshine estaba cubierto de rosas en distintas tonalidades, obsequio del rey a su querida esposa y reina Rosalía. La fragancia y la elegancia de la estructura apaciguaban las frustraciones de cualquier persona.La habitación de su hija estaba hubicada en uno de los jardines del palacio ya que le gustaba la intimidad y su propio espacio. Y que mejor que una habitación fuera del palacio pero también dentro.
Sin embargo su hija parecía bastante fastidiada por la reciente petición.
ESTÁS LEYENDO
Sangre y Fuego
Science FictionRhaenyra Targaryen, princesa de Rocadragón, alfa sangre pura heredera al torno, primera de su nombre. Reina de los Ándalos y los Rhoynar y los primeros hombres, Señora de los siete reinos. Tras la traición de su mejor amiga y la enfermedad de su pa...