Twisted

Capítulo 4: ' Between Brothers'

Joey

Llegué a casa y las cosas estaban más silencioso de lo normal, alcé las orejas para asegurar... si, ya hay alguien en la casa.

Joey: ¡Mokuba!- caminé hasta las escaleras y subí- ¿te moriste de tanto hacer tarea?- apenas se abrió la puerta de su cuarto, corrió a abrazarme.

Mokuba: No, ya la hice toda, estaba esperando a que llegaras- sonreí y dejé mis cosas en el cuarto- ¿vas a hacer la cena?

Joey: Si veo que no hay nada en la nevera, si, ¿por qué preguntas?

Mokuba: Porque quiero ayudarte- sonreí, este minino resultó ser muy diferente a como yo creía- ¿si?

Joey: Ya veremos- me cambié y bajamos a mirar que hay en la nevera....- ¿vamos a comprar para hacer yogurt con frutas o un flan?

Mokuba: ¿No se pueden las dos cosas?- bajé las orejas.

Joey: Buen punto, buen punto- miré e hice la lista, falta el yogurt, la leche condensada, crema de leche y esencia de vainilla- vamos.

Salimos caminando y paseamos por ahí de una vez, llegamos a la tienda y compramos las cosas, aunque con la esencia de vainilla tuvimos que ir a tres lugares diferentes, pero al final la conseguimos, después regresamos a casa y... Seto aún no llegaba, Mokuba me dijo que eso era normal, pero no sé... yo no me he puesto así con el trabajo, así que a mí no se me hace normal... pero bueno, ya miraré que día voy a hablar de eso con él, hicimos "la cena", si es que se le puede llamar así y mientras el flan se congelaba, nos comimos las frutas con el yogurt mientras veíamos la televisión, después el flan estuvo listo y comimos un pedazo, miré la hora.

Joey: A dormir, que mañana hay que estudiar- apagué el televisor.

Mokuba: ¿Me acompañas a dormir?- asentí y fuimos al cuarto, me acomodé y Mokuba se metió entre las cobijas y después me buscó- gracias- acaricié su cabeza y sus orejas de minino antes de quedarme dormido.

Al día siguiente...

Mokuba

Mientras estábamos en descanso, le escribía a Joey, hoy llego más temprano y quiero saber si él no llega tarde, porque quiero hacer algo con él... y también porque compito con mi hermano por su atención, así que hay que aprovechar para volverme el consentido, esa cosa bonita que nadie puede quitar la atención, si, eso, además hay cachorros que se llevan bien con mininos como yo, así que hay que aprovechar... me dijo que llega a las dos, estaré terminando de almorzar, así que hoy es mi día.

Esperé a que se terminara las clases, cosa que para mí fue una eternidad, y después me recogió Isono y me llevó a casa, apenas llegué le pedí que se fuera con mi hermano, que hoy voy a ser feliz, llegué y calenté el almuerzo que hice, porque no me acordaba que solo estaba mediodía, y apenas llegó me puse feliz.

Joey: ¿Quieres hacer algo?, ¿salir o nos quedamos aquí?

Mokuba: Salgamos, hace sol, caminemos- al ver que su cola de cachorro se movía, evité reírme, él no se da cuenta, y eso lo hace más especial. Salimos y acompañé a Joey a almorzar, le pedí que me contara de como le fue en su trabajo y me mostró fotos- ¿cómo te salen así de bien?, hace que nos fotos para exposiciones se vean inútiles.

Joey: Es práctica Mokuba, yo no me hice experto de un día para otro- seguí viendo y encontré una foto con un gato.

Mokuba: ¿Y él quién es?- miró la foto.

Joey: Mi hermanastro, Yugi- seguí viendo..

Mokuba: ¿Cuándo voy a conocerlo?, tengo que ver que hábitos tienes cuando están los dos.

Joey: Ya veremos, salimos a vacaciones casi al tiempo, ya sacaremos una tarde- ¡si!

Seto

Mientras descansaba le escribí a Joey, pero no me contestaba, mi hermano no me escribió, y tampoco... siento algo raro, miré la red social de mi hermano y vi una publicación de hace una hora, Mokuba está con Joey.... Mokuba está con Joey... ¡¿quién se cree ese minino malcriado?!, pasa el rato con MI ESPOSO, miré la hora y acabé el trabajo más rápido, me aseguré de que estuviera bien y me fui a la casa.

Yami: Ya deja de competir, los niños siempre ganan- Yami me llamó, es es mejor socio que tengo, pero amigo... a veces si y a veces es malo- por eso yo no quiero tener mininos.

Seto: Y de seguro Yugi estará de acuerdo contigo, que lo dicen tan seguro- se quedó callado, hasta que por fin pude tener mi revancha- mira, más tarde me voy a reír de tí, tengo que consentir a mi cachorro.

Llegué a la casa y todo está silencioso, aunque claro, llegué tarde, caminé con cuidado de no ser ruidoso, y los dos estaban dormidos, ¿desde cuándo Mokuba duerme en mi cama?, intenté acomodarme, pero mi hermano me pateó, Joey abrí un ojo y con cuidado se movió, me hice al otro lado y Joey puso su cola encima, yo entrelacé la mía con la suya, te quiero cachorro.

Hasta el próximo capítulo....