Twisted

Capítulo 13: 'Habits to Be Corrected'

Mai

No sé que debo hacer... Yugi se quedó dormido haciendo el trabajo, pero no puedo despertarlo porque se asusta fácil y porque no puedo darle algo para que se despierte, porque como está esperando... gatitos, como dice él, no puede tomar nada de eso, ¿qué hago?, ¿ahora qué hago?, debo despertarlo, pero no quiero que se convierta en caos... ah, espera... puse mi alarma del almuerzo, la dejé cerca de él y apenas sonó, se despertó normal y perfectamente se levantó sin problemas, suspiré del alivio... pero eso me duró poco cuando sentí que alguien me estaba mirando...

Yami: ¿Para qué me llamabas?

Mai: Ah, si...- un año desde que lo vi, y todavía me da miedo este hombre- quiero mirar si puede convencer a Yugi de que... tal vez es momento de que se quede en casa- los dos miramos y se levantó a seguir trabajando- sé que no quiere, pero cuando se queda dormido, no sé como despertarlo, y ahora que lo pienso... iré a decirle que vaya a desayunar- llevé a Yugi a la cafetería y me aseguré de que comiera bien- Yugi, ¿no has pensado en tomar un descanso?, digo... no creo que hayas dormido bien anoche...

Yugi: Descuida, dormí como nunca y me siento bien- terminó de comer y me impresionó lo que dijo-descansaré un rato y seguiré con el vestido, hasta que no lo termine, no estaré tranquilo- y se fue sin nada más que decir... ay dios mío, ayúdame por favor.

Me quedé al lado de Yugi todo el rato, Yami estaba escondido en mi oficina porque no quería que Yugi se sintiera mal, porque él perfectamente puede pensar que no quiera que él trabaje, y se pondría a llorar y si él llora yo lloro también... cosas de gatos domésticos.

Y cuando ya eran las tres de la tarde, Yami apareció y se llevó a Yugi, yo le dije que descansara un poco y que yo vigilaría su trabajo... y suspiré, al parecer cuidar a un gato embarazado es más difícil de lo que parece.

Yami

Apenas llegamos a casa lo ayudé a cambiarse y me aseguré de que se quedara quieto y calmado, también he pensado en lo que dijo Mai, ya lleva seis meses, y aunque las cosas están bien y el proceso va perfecto, aún hay hábitos que no le logro quitar a mi Yugi, y en estos casos no sé que hacer, no es algo de salud, así que el médico no puede ayudarme con esto...

Yami: Amor, recuéstate, quédate tranquilo, ya no estás trabajando- lo recosté y me senté a su lado- pareciera como si estuvieras tenso.

Yugi: Lo siento, simplemente sigo pensando en el trabajo y en cosas que quiero hacer al mismo tiempo- se acarició el estómago ya grande- no puedo evitarlo.

Yami: Entiendo eso amor, te he visto trabajar tanto...- me acomodé- pero recuerda que ahora estamos esperando dos gatitos, y debes cuidarte mucho- tomé su mano- y créeme que no me gusta cuando no regresas por las noches, me preocupa que... llegué el día que esperamos y sea la última persona en enterarme.

Yugi: No, no pasaría... ¿de verdad lo hago?, ¿ya debería quedarme en casa hasta... que pueda regresar?- dejó su mano en su estómago..

Yami: Es lo mejor aibou, temo por los tres, no quiero que les pase nada, y aunque nos hemos cuidado mucho y están bien... no quiero que ocurra algo malo- dejé que lo pensara solo, yo solo estaba ahí, viéndolo, literalmente...

Yugi: De acuerdo, le avisaré a Mai para que firme los papeles y en la casa- lo abracé.

Yami: Haré lo mismo, no creas que te dejaré solo- nos reímos, por fin, a salvo en casa.

Seto

Apenas llegué al edificio, vi a Joey dormido frente al computador, Mokuba me había dicho que cuando no estoy, las cosas son iguales en casa, pero no pensé que esto de verdad estuviera pasando, lo cargué con cuidado y me lo llevé a casa, apenas llegamos le pedí a mi hermano que sacara la cobija gruesa, porque está haciendo más frío que de costumbre.

Me quedé viéndolo dormir, Joey va a pelear para seguir trabajando, aunque esté llegando a la mitad del embarazo... sé que no se dejará, así que hablé con su médico y logró remitir una orden de que ya se quedara en casa, que se quedara quieto, de verdad tengo miedo que le pase algo y... las cosas se compliquen un poco, así que tomé esto por mi cuenta, y sé que Joey me va a pelear, porque normalmente es su decisión, pero siento que no es lo correcto.

Al día siguiente...

Apenas a Joey le llegó el correo, hablamos, literalmente nos sentamos a hablar, claro que se le hizo raro, aunque me impresionó que no se enojara, y cuando me preguntó sobre sus límites, Mokuba entró y entre los dos le dijimos que no se estaba cuidando como debería, así que al final, se lo tomó de la mejor forma y aceptó quedarse en casa, y yo ya haré el mismo proceso, también tengo hábitos que corregir.