AVATAR la leyenda de Marinette

Libro Aire 🍃

Capitulo 5: La Bella Avatar y El Maestro Fuego

Narrado por Adrien

Mientras caminábamos por las calles del pueblo, podía notar que Marinette se veía inquieta y distante. Algo la estaba molestando, pero parecía tener dificultades para expresarlo.

"Marinette, ¿estás bien?" pregunté con suavidad. "Te noto algo preocupada".

Ella me miró con nerviosismo y asintió. "Sí, estoy bien, es solo que... tengo algunas cosas en mi mente, eso es todo".

Sabía que no me estaba diciendo toda la verdad, pero no quería presionarla. "Entiendo. Si necesitas hablar de algo, sabes que puedes confiar en mí, ¿verdad?"

Marinette me dio una pequeña sonrisa. "Sí, lo sé. Gracias, Adrien".

Continuamos recorriendo las tiendas del pueblo, pero podía ver que Marinette parecía estar distraída la mayor parte del tiempo. Me preguntaba qué era lo que la estaba molestando tanto.

En un momento, pude ver a Aphelios observándonos desde lejos. Supuse que solo quería asegurarse de que su hermana estuviera bien. Me alegré de que Marinette tuviera a alguien que la apoyara.

Mientras miraba a Marinette, no pude evitar notar lo hermosa que se veía. Su cabello azabache, sus ojos azules y su sonrisa tímida me cautivaban cada vez más. Sentía que mis sentimientos por ella crecían con cada momento que pasábamos juntos.

Finalmente, nos detuvimos en una pequeña tienda de té. Marinette parecía estar un poco más relajada aquí.

"¿Quieres tomar algo?" le pregunté, intentando romper el silencio.

Ella asintió. "Sí, un té suena bien".

Mientras esperábamos nuestras bebidas, noté que Marinette parecía estar buscando las palabras adecuadas para decir algo. Decidí esperar pacientemente y darle el tiempo que necesitara.

Finalmente, Marinette se volvió hacia mí, con una expresión de determinación en su rostro. "Adrien, hay algo que he querido decirte desde hace tiempo, pero... me ha costado mucho trabajo".

Mi corazón comenzó a latir con fuerza. "¿Qué es, Marinette?"

Ella tomó una profunda respiración y me miró a los ojos. "Adrien, yo... yo te amo. Siempre lo he hecho, pero tengo tanto miedo de que tú no sientas lo mismo por mí".

Me quedé sin palabras por un momento, sorprendido por su confesión. Luego, con una sonrisa, le dije: "Marinette, tú también me pareces una chica muy linda y fuerte, no solo por ser el Avatar, sino por tu valentía, tu determinación y tu bondad. Y la verdad es que... también me gustas mucho".

Pude ver cómo una sonrisa se dibujaba en el rostro de Marinette, y sus ojos brillaban con una nueva luz. "¿De... de verdad?"

Asentí y, sin poder contenerme, la abracé con dulzura. "De verdad".

En ese momento, pude ver a Aphelios a lo lejos, observándonos con una gran sonrisa. Parecía estar satisfecho de ver a su hermana finalmente expresar sus sentimientos.

Marinette y yo nos tomamos de la mano y continuamos nuestro paseo por el pueblo, sintiéndonos más unidos que nunca. 

Narra Marinette:

Después de confesarle mis sentimientos a Adrien en el pueblo, me sentía más tranquila y aliviada, pero aún había un poco de nerviosismo dentro de mí. Sabía que mis habilidades como Avatar me convertían en alguien especial, pero aun así temía que Adrien solo me viera de esa manera.

Un día, me dirigí al campo de entrenamiento para practicar mis técnicas de aire control junto a Alya. Necesitaba mantener mis habilidades afiladas y en su mejor nivel.

Mientras realizaba mis ejercicios, noté a lo lejos la figura de Lila acercándose. Esa chica siempre intentaba molestarme y desacreditarme. Hoy no sería la excepción.

"Vaya, vaya, miren quién está aquí, la todopoderosa Avatar", dijo Lila con sarcasmo. "¿Crees que tus trucos de aire control te hacen especial?"

Alya se paró frente a mí, protegiéndome. "Déjala en paz, Lila. Marinette es mucho más que solo el Avatar. Ella es una gran amiga y una persona increíble".

Lila se rió con desdén. "Oh, por favor, Alya. Todos saben que Marinette solo es una chica tímida y torpe que tuvo suerte de ser elegida como el Avatar. Apuesto a que ni siquiera puede mantener el equilibrio mientras controla el aire".

En ese momento, Adrien llegó al campo de entrenamiento y se acercó a mí. "¡Marinette, mi bella Avatar!" dijo con una gran sonrisa. "Te estaba buscando. ¿Cómo van tus prácticas?"

Lila lo miró con sorpresa y enojo. "¿Tu bella Avatar? ¿Qué quieres decir con eso, Adrien?"

Adrien la miró con seriedad. "Quiero decir que Marinette es mi novia, y que la respeto y admiro profundamente, no solo por ser el Avatar, sino por quien es como persona. Ella es fuerte, valiente y una de las mejores maestras aire que conozco".

Lila abrió la boca, sin saber qué decir. Alya y yo intercambiamos una mirada de satisfacción.

"Así que, si te atreves a volver a insultar o menospreciar a mi novia, te las verás conmigo", concluyó Adrien, rodeando mi cintura con su brazo.

Me sentí tan feliz y segura en ese momento. Adrien me había defendido y había dejado en claro que me aceptaba y valoraba por quien soy, no solo por mis habilidades como Avatar. Saber que me amaba y me apoyaba me llenaba de una calidez y fortaleza que jamás había experimentado.

Lila, sin poder decir nada más, se alejó con rabia. Adrien me miró con ternura y me dio un suave beso en la frente. "Eres mi bella Avatar, Marinette. Nunca lo olvides".

Sonreí con felicidad y me acurruqué en sus brazos, agradecida por tener a alguien tan especial como él a mi lado.