6-POR LA PROMESA

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HUGO

Me entraba en mi habitación apunto de bajar para desayunar, cuando alguien entro era Hera, me pareció extraño ya que no suele entrar de repente pues siempre toca.

-¿Que sucede?- pregunté

- Lo siento por entrar tan derrepente pero necesito que firmes unos documentos -

- Debiste haber esperado a que bajará -

- Lo quería hacer pero me acabo de comunicar con Ali y me pidió que se los llevará enseguida, al parecer hoy terminara de hacer el trato y necesita los papeles -

- Está bien dámelos para firmarlos -

- Por cierto, no he estado en la casa, haci que no he tenido tiempo de preguntarte, pero que paso con el tío de Ian -

- No lo sé, después de que mande al chico al hospital con uno de mis hombres no he sabido nada de él -

- Al hospital por qué? -

- Al parecer su padre estaba internado, la verdad es que no se muy bien el contexto de su situación, esto era todo -

- Si, bueno me retiro -

- Está bien, iré a la empresa más tarde -

- ok-

Después de decir eso Hera se retiró y yo salí después de un rato para desayunar, pero ahora que lo recuerdo, ese chico peculiar no se ha aparecido por aquí y ya han pasado 4 días, se habrá rendido, no creo, bueno sea lo que sea a mí me combine más que se mantenga lejos.

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NARRADOR

Alex se encontraba en la habitación de un hospital donde se encontraba su padre al lado de el estaba un chico alfa que lo consolaba, habían pasado ya cuatro días desde lo que le dijo el doctor, el sentimiento de culpa lo consumía cada día.

El sabía que no era su culpa sin en cambio eso no cambiaba el hecho de que pudo haber hecho algo y su mente se debatía en eso y lo consumía.

- Alex, por favor cálmate un poco tranquilizante, ya han pasado 4 días y sigues con lo mismo -

-Lo se ya entendí que no es mi culpa pero hay algo en mi que no deja que ese sentimiento se baya, es como si mi mente sola me traicionará -

- Entiendo , pero el hecho de que te la pases llorando no va a cambiar las cosas -

- Entonces que quieres que haga, mi padre está en frente de mi y yo no puedo hacer nada para mejorar su situación -

- Entonces pretendes quedarte nuevamente a llorar -

Después de decir eso Manuel salió de la habitación dejando solo en la sala a Alex,
Quién todavía se encontraba llorando.

Ya habían pasado una horas y Alex no se había separado de su padre, de repente escucho un sonido familiar que le hizo temblar, el sonido que escucho cuando su hermana estaba muriendo.

- No, no, no, esto no puede pasar, no el no -

Salió de inmediato a la sala para buscar un doctor, aunque eran demasiado tarde su padre estaba apunto de fallecer y el no podría hacer nada.

-Lo sentimos pero no pudimos hacer nada -

- no es verdad, no esto no puede ser cierto -

La Enfermera salió de la habitación para dejarlo solo, Alex solo se quedó en shock por su mente pasaban demasiadas cosas su padre ha fallecido y el se ha quedado solo lo último que le queda es su sobrino.

Fue sacado de sus pensamientos cuando alguien le hablo era Manuel, quién entró de repente a la habitación

- Lo siento, no debí haberte dicho eso -

- No te preocupes ya no tiene caso pensar en eso -

- Todavía no despierta? - pregunto refiriéndose al cuerpo de su padre que se encontraba enfrente

- No, y ya no lo hará - dijo acercándose al cuerpo para taparlo con la sábana blanca

-¿ Que?¿A qué te refieres con eso? -

- Pues eso mismo mi papá ya no despertara , acaba de fallecer -

- ¿Que?, no es verdad, el señor Santiago no puede fallecer así nada más, es broma verdad -

- ¿Crees que bromearia con algo tan delicado?-

- No, lo siento, se que no lo harías pero es que eso no puede ser posible -

- Pues lo es, mi Padre murió -

Después de decir eso entraron algunas personas para llevarse el cuerpo y prepararlo, dijeron sobré los trámites que tenía que hacer, para liquidar la cuenta del hospital y firmar el acta de defunción.

Manuel ayudó con todos los trámites y  apoyo económicamente a Alex para los servicios de funeraria y el velorio, al cual asistió mucha gente.

Después de que Alex enterrara a su papá, toda la gente se retiró dejandolo solo, en ese momento Alex se dispuso a llorar lo que no lloro en estos días.

- Porque tú también tenías que irte, no solo mi hermana....sino que ahora tu también, que haré solo -

Se arrodilló ante la tumba de su padre diciendo eso su voz se escuchaba tan rota y en su mente solo quería que todo eso fuera una pesadilla.

Después de un rato sintió las manos de alguien sobre su cuerpo, era Manuel

- Ya es tarde deberíamos ir a casa -

- Está bien, solo dame 10 minutos más -

- No Alex, ya es tarde y necesitas descansar no has dormido nada y tampoco has comido bien -

- Lo se, solo es que no quiero regresar a casa, no se sentirá igual -

- Si no quieres ir a tu casa entonces puedes ir a la mía, puedes quedarte ahí el tiempo que necesites -

- No quiero ser una molestia, además ya hiciste demasiado con ayudarme con los trámites y lo del funeral, gracias -

- No hay nada que agradecer, todo lo que hice lo hice de corazón, y no serás ninguna molestia, haci que vamos -

Alex se fue con Manuel no sin antes jurar ante la tumba de su padre, que cueste lo que le cueste, el iba a cumplir la promesa que le hizo a su hermana.

Llegaron al departamento de Manuel, donde Alex lo primero que hizo fue darse una ducha para después comer, aunque no tenía apetito, pero Manuel lo convenció de comer para después irse a acostar, Manuel le había acomodado la habitación de invitados para que pudiera descansar.

No tardó demasiado en quedarse dormido, después de todo ya estaba agotado tanto mental como físicamente, ya mañana pensaría como quedarse con su sobrino

El destino nos uneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora