Capítulo 10

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Roberto tenía un plan para arreglar las cosas con Topo:

— A ver, paso uno le voy comprar unas flores, recuerdo que una vez llegó súper emocionado al estudio con unas flores, pero y ¿si ya no le gustan las flores?, no lo creo, bueno, punto uno; flores. Punto dos; chocolates, él los ama, además de que recuerdo cuales son sus favoritos. Y punto tres y más importante; pedirle perdón, pero ¿cuál será la mejor forma? — Decía Roberto mientras daba vueltas de un lado al otro, se encontraba demasiado preocupado y nervioso. Se estaba jugando demasiado, si cometía un error Topo podría enojarse e irse de la banda, tendría que volver a buscar un reemplazo, lo que sería bastante complicado, ya que Robert consideraba que conseguir un guitarrista a la altura de Topo sería muy difícil, pero eso era lo que menos le importaba.

Lo más importante para él, era que si Gustavo se enfadaba con él, ya no volverían a estar juntos, ni siquiera como amigos, y eso para Roberto era nefasto. Topo era la segunda persona más importante en su vida (La primera era su hija Federica), se moriría si Gustavo se alejara de él, Topo alegraba sus días algo que por sí mismo no podía hacer.

Entonces debía pensar cada palabra a la perfección para no cagarla. Así que luego de pasar casi una hora, ya que él era alguien muy perfeccionista, logró encontrar las palabras, que en su opinión eran las más atinadas. Practicó frente al espejo por un largo rato, en el que se reprochaba a sí mismo cada vez que se equivocaba.

Cuando al fin decidió la mejor manera de darle una explicación a Gustavo y pedirle disculpas, se cambió de ropa, le envió un mensaje a Roberto avisándole de que iba para su casa(aunque sabia que no iba a responder), arreglo sus cosas las cuáles metió en un bolso y salió de su casa, y a pesar de que en la mañana había llovido, había salido el sol, dándole una sensación cálida al cruzar la puerta.

...

Mientras tanto en la casa de Gustavo.

Topo se había perdido en sus pensamientos, se encontraba acostado sobre su cama mirando el techo, la habitación estaba oscura y con las persianas de las ventanas serradas de par en par para no dar paso a la luz exterior, la única luz en esa habitación era la que provenía de la televisión, en la cual se estaba reproduciendo "Yo soy Betty, la fea" la cual era una de las pocas, si no es que la única, novela que le gustaba, pero como Gustavo estaba metido sus pensamientos los diálogos y sonidos reproducidos se escuchaban como murmullos sordos.

—Si la razón de vivir de las personas es por la que están vivos, entonces, ¿Por qué sigo vivo si no tengo razón de vivir? — Se cuestionaba internamente, para después soltar un pesado suspiro—A veces pienso mucho— Dijo en un murmullo.

Después de esos pensamientos tan ambiguos, se empezó a cuestionar si volver a fumar, acción que hace tiempo había dejado de hacer, porque creía que ya no lo necesitaba, pues en ese momento se sentía mejor, pero había vuelto a sentirse mal, así en su cabeza lo estaba considerando una opción.

De repente un sonido lo hizo volver a la realidad, alguien estaba tocando la puerta. Sin muchas ganas, el guitarrista se levantó de su cama, se dirigió hacia la puerta principal arrastrando sus pies, cuando abrió la puerta, la luz le encandiló los ojos.

—¿A qué hora salió el sol?— Preguntó Topo en un murmullo.

Después de unos cuantos segundos, que necesitaban sus ojos para adaptarse a la luz, se encontró con la razón de su preocupación, Roberto, quien tenia sus manos detrás de si.

Cuando Topo lo vió casi le da un infarto, ya que no esperaba verlo, aunque, irónicamente, deseaba verlo y hablar con él.

—Hola Gus, ¿puedo pasar?, es que quiero hablar contigo— Dijo el vocalista mientras le dedicaba una sonrisa, sonrisa a la cual Topo no prestó atención y no correspondió, ya que a su mente vino el recuerdo de ese sueño que había tenido hace tan sólo unas horas. Pensando que le diría algo parecido, a Gustavo se le había bajado la sangre al suelo del susto.

—¿Estás bien, Topo? — Preguntaba Roberto confundido mientras chasqueaba sus dedos en frente de la cara del guitarrista, ya que este se había quedado en una especie de trance.

—Ah, sí, pasa— Respondió saliendo de su trance abriendo la puerta aún más de lo que ya estaba mientras hacía un gesto para incitarlo entrar.

Después de que Roberto entrara a la casa, Gustavo cerró la puerta y ambos se dirigieron a la sala.

—Ah, por cierto, te traje algo, Topito— El vocalista se detuvo para mostrar lo que escondía tras su espalda, eran unas flores, específicamente unas rosas rojas mezcladas con flores amarillas— Y también te traje algo más— Sacó unos chocolates de su bolso, chocolates los cuales Topo reconoció al instante ya que eran sus favoritos.

Topo se encontraba sorprendido, realmente no se esperaba eso, era un muy lindo detalle. Estos obsequios hicieron que el guitarrista entendiera que Roberto no estaba ahí para decirle cosas como en su sueño, pero igual dudaba, además de que necesitaba una explicación, el porque de que lo estuviera ignorando durante ese tiempo.

—Aww, Robert, muchas gracias, no era necesario— Gustavo sonreía tiernamente gracias a esos obsequios, lo cual alegro mucho a Roberto.

Topo agarró los regalos, metió los chocolates al refrigerador para que no se derritieran y las flores las puso en un jarro con agua que dejó sobre la mesa de la cocina.

Cuando Gustavo volvió a la sala vió a Roberto sentado en un extremo del sofá. Topo se dirigió hacia donde estaba Roberto y se sentó en el otro extremo del sofá. Era hora de hablar, y Gustavo ya se imaginaba por donde iba el tema así que estaba ligeramente despreocupado, aunque el miedo aún seguía en él.

—Bueno, ¿de que quieres hablar? — Pregunto el guitarrista tratando de que su tono de voz sonara seguro pero realmente él estaba muy nervioso se estaba muriendo de miedo temiendo lo peor, aunque trataba de convencerse mentalmente diciéndose así mismo que eso no iba a pasar.

—Mira te quiero pedir perdón, por no haberte hablado en todo este tiempo, si estás enojado conmigo tienes todo el derecho de estarlo,— Mientras Roberto decía esto movia sus manos de una manera ligeramente ansiosa, aunque estaba tratando que Topo no lo notara, además de que desviaba su mirar a hacia otro lugar que no fuera el rostro de el de lentes, simplemente no podía mírarlo los ojos— se que me porte de manera inmadura pero necesitaba procesar la situación, no era mi intención portarme de esta manera y perdón pero no me pare a pesar si esto te molestaría o no, de verdad espero que me perdones, quiero decirte que te amo de verdad y no quiero que estés enojado por una estupidez mia— al finalizar de hablar tomó la mano de Gustavo con ambas manos, queriendo transmitirle confianza, además de que por alguna razón que el no comprendía un simple tacto del menor le transmitía tranquilidad.

—Robert, no estoy enojado contigo, se que me dejaste de hablar pero eso solo me entristeció creí que tú estabas enojado conmigo— Gustavo miraba directamente a los ojos a Roberto el cual imitaba su acción.

—¿Por qué estaría enojado contigo? — Se mostraba confusión en la voz del hombre de cabellos rizados.

—Esa misma pregunta me hago yo pero realmente lo único que quería era una explicación, pero es realmente lindo que te hayas disculpado y me hayas traído esos detalles, a pesar de que yo no los esperaba, pero no me interpretes mal, eso me demostró que te importo— Dijo Topo acercándose a Roberto.

—Claro que me importas, me importas demasiado, eres de las personas más importantes en mi vida Gus— Roberto se sentía bien por haber podido resolver la situación y ahora simplemente estar exponiendo sus sentimientos y pensamientos por el otro.

—Ay Robert por eso es que me enamoré de tí, por tu sinceridad y que dices las cosas sin rodeos, te amo Roberto— Ambos se abrazaron y se dieron un tierno beso, para después de unos minutos separarse.

—¿Quieres ir a mi habitación? — Preguntó el de lentes mientras se levantaba del sofá mientras le dedicaba una sonrisa al vocalista.

—Sí, por supuesto— Respondió Roberto devolviéndole la sonrisa mientras se levantaba para seguir a Gustavo.

Ambos hombres se dirigieron hacia la habitación del guitarrista.

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⏰ Última actualización: Aug 19 ⏰

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𝐻𝑎𝑠𝑡𝑎 𝑒𝑣𝑎𝑝𝑜𝑟𝑎𝑟𝑛𝑜𝑠 𝑒𝑛 𝑒𝑙 𝑣𝑖𝑒𝑛𝑡𝑜... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora