Prólogo

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Meliodas y Elizabeth al fin pudieron liberarse de la maldición que les impedía amarse en paz, la guerra santa al fin habia acabado pudieron vencer a la Deidad Suprema junto con el Rey demonio. Los clanes estaban en paz y se mantenían en armonía e incluso el clan de los demonios y las diosas que a pesar de seguirse odiando no luchaban solo por paz.

Nuestros héroes pudieron cansarse con quienes aman, bueno, la mayoría...

Meliodas pudo casarse con Elizabeth al igual que King pudo casarse con Diane y Ban con Elaine. Gowther siempre le sería fiel al amor que sintió, siente y sentirá por Nadja aúnque ella ya no esté presente, Merlín desapareció del mapa y Escanor... lamentablemente murió...

El tiempo pasó y Elizabeth quedó embarazada al igual que Elaine y Diane, muchos estuvieron contentos ante aquellas tan alegres noticias. Los padres de los bebés no pudieron evitar llorar el día en que descubrieron que su amada estaba embarazada, no cabe duda que aquella noticia era la que más les había alegrado como nunca en su vida.

Con la nueva era que habían formado sus hijos crecería y tendrían una vida pacífica...¿Verdad?.

....

Arturo quién se dejó corromper por el Caos había creado un nuevo Camelot, una dimensión donde él, Merlín y los sobrevivientes del antiguo Camelot ahora vivían. Ninguno de los clanes decidió hacer algo pues la Nueva Camelot no había hecho nada malo...aún.

En el palacio de Liones se estaba realizando un festejo por el embarazo de las tres reinas (en otra palabras era un Baby Shower), Elizabeth, Elaine y Diane que estaban sentadas en tronos diferentes con características de acuerdo a su personalidad de cada una, las tres se encontraban hablando con muchos a ánimos y alegría.

Los esposos de las reinas (Meliodas, Ban y King) se encontraban en medio del salón donde se llevaba a cabo el festejó participando en los juegos de la maravillosa celebración. Gowther era quién se encargaba de que cada jugador cumplirá con las reglas de los juegos.

—Ya no veo la hora para saber si mi bebé será un niño o niña—. Diría con tanta emoción Elaine mientras acariciaba su vientre de solo siete meses. —Para ser sincera no me importa si mi bebé es niño o una niña pero aún así Ban y yo estamos muy ansiosos por saber que será—. Confesó abriendo los ojos y mirando a su amiga y cuñada.

—Bueno...—. Elizabeth se rascó un poco la mejilla con algo de nervios. —Para ser yo también sincera; Meliodas y yo queremos a una niña—. También confesó con una pequeña sonrisa nerviosa acariciando su vientre de seis meses. —Aun que si es un niño de todas maneras estaríamos felices—. Sonrió con mucha alegría.

—Pues King y yo no nos importa mucho el sexo de nuestro bebé, con tal de que Nazca sano todo estará bien—. Dijo Diane sonriendo con mucha emoción acariciando también su vientre de cinco meses. —Aun que King está preocupado de que el bebé nazca sin un género definido...—. miró a su esposo con preocupación.

King tenía los ojos vendados mientras era guiado por Ban por medio de su voz para que pudiera ponerle el chupón al bebé de juguete que estaba en la silla pero lamentablemente Ban se equivocó en una palabra y King termino por caer junto con la silla donde estaba el bebé de juguete. Diane y Elaine rieron al ver eso.

—¡Cierto!—. Dijo Elizabeth. —Algunas Hadas nacen sin genero y solo lo obtienen si se enamoran de alguien—. Recordó ese detalle que Gloxinia le había dicho en su primera vida cuando se conocieron. —¿Por qué le preocuparía eso a King?.

—Solo diré dos cosas Eli; Padre celoso—. Dijo eso como respuesta haciendo reir a la rubia y a la Deidad, Diane tampoco pudo evitarse reírse.

Era un agradable momento, la música era maravillosa, los invitados se divertían con los juegos y algunos junto con sus hijos como Margaret y Gilthunder con Chion, Verónica y Griamore también se divertían con los juegos, algunos comían mientras decían que serían unos grandes Tíos para el bebé como Howzer quien recibió un golpe de King.

BLANCAFLOR. [Percival X Nasiens]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora