Capitulo 68

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Al sentir la presión en la cama, Dewitt no pudo evitar que su respiración se volviera un poco más ligera. A pesar de todo el riguroso y complejo entrenamiento que había recibido y de que mantener la calma en cualquier situación era una cualidad básica para él como soldado, en ese instante casi no pudo controlarse.

Wen Jin transformándose en humano era algo que Dewitt no había anticipado. Él simplemente estaba apostando, y no precisamente a que el pequeño zorro se convirtiera en humano, sino a que el pequeño zorro realmente lo quería.

Y en el momento en que sintió de verdad esa presencia y el peso extra a su lado, muchos pensamientos pasaron por su mente.

Por ejemplo, que si abría los ojos, podría ver la apariencia de Wen Jin. O, si los abría en ese instante y Wen Jin notaba que lo estaba observando, podría enojarse por la vergüenza y molestarse.

Con esos pensamientos de fondo, Dewitt luchaba intensamente con sus instintos, intentando mantener esas preocupaciones. Pero en el momento en que los suaves labios de Wen Jin tocaron los suyos, Dewitt no pudo contenerse más.

Con una mano, sujetó la muñeca de Wen Jin y lo atrajo hacia sí, profundizando el beso sin vacilación. Mientras lo hacía, Dewitt se sentía sorprendido y reverente.

Suavemente chupó los labios de Wen Jin, tratando de explorar con la lengua, mientras la presión en la muñeca del otro se volvía más ligera. Comparada con su propia piel, el cuerpo de Wen Jin era más suave, y su piel no se endurecía como la de los otros seres con habilidades especiales, como si al presionar un poco se dejaran marcas.

Sin embargo, esa sensación era incomparable. La piel de Wen Jin en ese momento, diferente de cuando era un zorro esponjoso, revelaba una textura sorprendentemente muscular al tacto, aunque no tan dura ni pronunciada como la suya, pero con una firmeza...

Dewitt no tuvo tiempo de explorar más cuando Wen Jin lo empujó con fuerza.

Dewitt sujetó el cuello de Wen Jin y abrió los ojos, encontrando su expresión ligeramente avergonzada. Al ver la figura que había anhelado durante tanto tiempo, recordó las veces que, en sus sueños, esa figura aparecía vagamente. Pero esa era la primera vez que veía claramente su rostro.

Entre sus labios se formó una línea fina al separarse. Dewitt acarició el cuello de Wen Jin, murmurando con devoción, "Cariño, cariño..."

Mientras susurraba, se acercó de nuevo para besar suavemente los labios de Wen Jin. Esta vez, cuando Wen Jin intentó empujarlo de nuevo, Dewitt se apartó voluntariamente, creando un espacio entre ellos, respirando profundamente con los ojos ligeramente enrojecidos.

El rostro clásico oriental de Wen Jin, al verlo realmente por primera vez, hizo que el corazón de Dewitt se apretara. En ese hermoso rostro, con unos ojos almendrados que siempre parecían sonreír, incluso cuando estaba enojado, y una nariz recta, todo enmarcado por su largo cabello suelto, desprendía una belleza llena de ternura.

Sintiendo una reacción mayor en su cuerpo, Dewitt apretó ligeramente los puños.

Al ser atrapado robando un beso, Wen Jin miró a Dewitt con cierta incomodidad. Quería retroceder y transformarse de nuevo en zorro, pero al mismo tiempo, se sentía justificado. No había hecho nada malo, ¿por qué tendría que esconderse?

Además, era la primera vez que la pequeña cola veía su forma humana... Wen Jin sentía una extraña expectación al respecto.

Después de pensarlo un rato, Wen Jin extendió la mano y empujó a Dewitt, sus ojos negros brillando intensamente. "¿Soy guapo?"

Dewitt se quedó sorprendido, como si no hubiera esperado esa pregunta. Una sonrisa se dibujó en sus labios y, extendiendo la mano, acarició la de Wen Jin. "Sí, eres guapo."

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