You Belong With Me

You are in love

Muchas gracias a todos por leer mis historias, hubo varios días que no publicaba pero ya pude organizar mis tiempos para seguir con ambas

Maratón 1/2

Abro mis ojos acostumbrándome a la luz de la mañana, sonrió recordando lo que ayer y y antes de ayer estuvimos haciéndolo peor que los conejos

Salimos del departamento para hacerlo en el avión mientras el viaje era de largas horas así que aprovechamos en hacerlo un par de veces

De camino al hotel nos prendimos y lo hicimos algo rápido pero gustoso

Dimos el golpe cuando entramos a la habitación donde volvimos hacer el amor una y otra vez hasta quedamos dormidas del cansancio

—Oficialmente bienvenida a nuestra luna de miel – sonrió

—Buenos días esposa – le digo dándole un beso – espera son días ¿no?

—Si – acomoda mi cabello detrás de la oreja – te amo

—Yo más – siempre peleamos quien a más a quien

—Báñate primero – se sienta – iré a ordenar nuestro desayuno para que recuperes fuerzas

—Es nuestro primer día de luna de miel – la abrazo por detrás – todavía tengo fuerzas

Se da la vuelta para besarme al cual yo rápido correspondo

—Iremos a una isla – me suelta – nuestro avión nos está esperando

—¿Solo para nosotras?

—Te dije que no habrá nadie más – me da un beso en la frente

Hago lo que me ordenó, entro a la ducha para bañarme

—Es cierto

Me miro mis pechos ¿es normal que me sigan creciendo?, están más grandes de lo normal ¿no es que me moleste!, me gusta mucho pero están muy sensibles

Hasta tengo las huellas de los apretones que me dio Totti

Me masajeó viendo lo grande que están ... espero que no solo sea algo hormonal y después de desinflen

—Si querías un masaje ... puedo dártelo – volteo a sacarla la lengua – seguirás – me señala mirando a mis manos

—Ya terminó

Salgo de la ducha, me ayuda a secarme y también aprovecha en tocarme ¡pervertida!

Salimos juntas tomadas de la mano para aquel desayuno que me prometió

—Todo está hermoso – digo al ver la decoración – te amo

Dejo un beso en sus labios, me acerco a la azotea para apreciar la mejor vista de la ciudad

Nos sentamos a comer el delicioso desayuno que ordenó mi esposa, había tostadas con mermelada, huevos revueltos frutas picadas entre otros

—Te vas a comer todo – me señala lo que queda e incluso pedí un poco más de frutas con yogur – mientras no estaba, ¿no as comido bien?

—Si .. pero – pasó el pedazo de papaya – quiero más, tengo mucha hambre

Ruedas los ojos esperándome a que termine, miro a sus ojitos que no me pierde de vista sonrió y lanzó un beso al aire

Me contó sobre los negocios que estuvo realizando en México, las ganas de comer se me quitaron cuando mencionó a Antonia

Salimos de hotel donde nos quedamos para conocer la ciudad un poco ya que en pocas horas nos iremos a una isla