𝟎𝟒 (𝐥)

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Fase lunar: Luna Nueva

Jungkook nunca se había detenido a admirar lo cuan, y realmente hermoso era, Kim Taehyung.

Aunque, en cierto ámbito y en variadas ocasiones él lo había hecho, claramente, como no. Le era sumamente inevitable aquel hecho, pero nunca desde la lejanía en la que se encontraba y con aquel hermoso escenario que le rodeaba.

Taehyung se encontraba sentado sobre el suelo con sus piernas cruzadas, sosteniendo y envolviendo sobre sus manos una rosa la cual se encontraba posada y algo enredada en el gran rosal a su lado, acariciando detenidamente con suavidad cada uno de sus pétalos; su cabello siendo acariciado por la brisa presente de aquella noche, y la luz de la luna acompañándole a Jungkook, en su ida admiración.

Un significado que lo hacía aún más, y sumamente, especial.

El sonido de los grillos contrastaba levemente con la bulla que provenía del interior el castillo, ya que aún era relativamente temprano para lo que era determinado el término de una celebración de este tipo, de esta inmensidad.

Comprendía, aunque no acostumbrada a ello ni a aquellos largos trotes por las noches.

Pero no se arrepintió en lo absoluto cuando su pecho se apretujó ante la ternura que emanaba aquel hermoso castaño, escuchándole tararear con tal angelical voz y totalmente decidido a acomodar su distinguido traje y a acercarse a pasos lentos hacia él, serpenteando entre los grandes arbustos hasta llegar e inclinarse por detrás suyo, sintiendo Taehyung a los segundos como la respiración y el aliento de una presencia conocida tocó y acarició su cuello, sobresaltandose y provocándole una corriente por toda su columna y espina dorsal.

- No te falle, Taehyungie. - susurró en un tono emanador, entregándole una sonrisa cálida.

El menor se encogió en su lugar, dejando aquella rosa a un lado y girándose para topárse con unos orbes que lo miraban con intensidad, pero con dulzura. Tan etéreo que fue imposible no inundarse de felicidad y regocijo ante tan hermosa y reconfortante imagen.

Y es que cuando ambos estaban juntos, perdían completamente la noción del tiempo, solamente existiendo ellos y el momento, perdiéndose tan solo en sus rasgos, sus emociones y los que les definía. Amaban la compañía que se brindaban el uno al otro, cada aventura, cada toque, cada palabra, tan embriagados por cada uno de ellos.

Sus propias y únicas fuentes de amor, y absoluto consuelo.

Taehyung logró sentirse medianamente cohibido cuando sus miradas conectaron por más tiempo de lo debido, ninguno emitiendo ni una mínima ni sola palabra. Movió su cabeza de un lado a otro tratando de calmar aquellos nervios que lo dominaron, algo el cual le resultó imposible, suspirando entrecortado cuando de un momento a otro sintió el frío de la noche pegar entre las delgadas telas que su cuerpo vestía.

Jungkook se percató rápidamente de ello, no demorando en deslizar sobre sus hombros fuera el abrigo de su traje, posándolo en los hombros del menor y entregándole de su propia calidez, dedicándole una mirada silenciosa al entorno y al cielo estrellado que les hacía esta bella y hermosa compañia.

- Tu rostro es hermoso bajo la luna Taehyungie, ella debería sentir envidia por ti. - confesó Jungkook sin desviar su mirada del cielo con una sonrisa juguetona dibujada en su rostro, causando una hermosa risa y cincelado rubor en las mejillas del menor, el cual él tanto adoraba.

- ¿Es una metáfora? - bufó y rio contagiado de alegria, apretando con sus dedos la tela del saco bajo sus hombros y refugiándose en él. - Tienes una mente muy creativa, ¿me harás lidiar toda mi vida con ello?, creo que caeré en un conflicto emocional si sigues tratándome así.

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⏰ Última actualización: Oct 10 ⏰

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𝐌𝐨𝐨𝐧𝐥𝐢𝐠𝐡𝐭 𝐢𝐧 𝐭𝐡𝐞 𝐦𝐢𝐝𝐧𝐢𝐠𝐡𝐭 | 𝐊𝐨𝐨𝐤𝐕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora