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El automovilismo estaba de luto. En menos de un mes habían perdido a dos seres queridos.

Uno de ellos era Lance, el pequeño que amaba jugar a los superhéroes con los mecánicos, el que saludaba con un choque de puños a todos los pilotos, y a Fernando, excelente piloto, buen amigo y sobre todo buen padre.

El dolor en su corazón fue tan fuerte que no resistió más.

Una noche decidió cumplir su promesa y a las 14:18 hrs del 3 de agosto fue hallado muerto en el baño de su casa.

El gran Magic Alonso siempre será recordado como el gran hombre que fue, como el amigo que siempre estaba ahí cuando más lo necesitabas, como aquel al que un pequeño canadiense de tan solo 5 años le robó el corazón en el momento menos esperado.

Ahora ambos estaban juntos ¿en el cielo? no lo sabemos, pero lo que sí podemos asegurar es que Fernando lo siguió buscando hasta encontrarlo, ahí, escondido detrás de una pila de neumáticos. Lance seguramente le está pidiendo que cuente de nuevo porque la primera vez Fernando hizo trampa y lo vio esconderse. No sabemos con exactitud qué pasa después de la muerte, pero es reconfortante imaginar que padre e hijo siguen compartiendo momentos de alegría como lo hicieron en vida.

Es reconfortante imaginar que Fernando pudo volver a ver a su pequeño Lance.

Little Lance | StrollonsoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora