Un Amor Suavemente Amargo (Angel Dust x Husk)

Capítulo 8 (Reescrito)

Horas más tarde llegó Angel al hotel de nuevo, exhausto por las grabaciones que tuvo que hacer con Valentino después del desastre que causó Charlie, no la odiaba, simplemente estaba algo molesto porque tuvo que ser reprendido por culpa de ella, y le dolía bastante.

—Ngh...necesito beber, dame lo más fuerte que tengas...—musitó con cansancio, recostandose en la barra del bar.

—Estás hecho mierda. —respondió Husk mientras tomaba un vaso y un whiskey para servirle a Angel, quien al escuchar sus palabras se sentó recto y arregló su expresión de cansancio por la coqueta de siempre.

—Tch...eso es imposible, dame unos shots, ¿quieres? los necesito...—dijo con calma y firmeza, ocultando lo cansado y adolorido que se encontraba mientras tomaba el shot que Husk le había servido—¡Te dije que me dieras algo fuerte! —exclamó una vez finalizó su trago.

—¡Disculpame! no sabía que era una noche para beber y olvidar...—respondió Husk con seriedad, sabía que Angel quería ahogar su dolor y abuso en una botella de alcohol, y no quería permitirlo.

—¡Oh! se me olvidaba que eres el cantinero sabelotodo ¡un gran iluminado! —abrió los brazos con sarcasmo y bufa— Cierra tu puta boca y sírveme otro cabrón —comandó mientras volteaba el vaso con el whiskey dentro, regando su contenido por la barra.

—Oye, si tienes problemas, no los vas a resolver en el fondo de una botella...—expuso con paciencia mientras limpiaba la barra— debí saberlo antes de acabar con mi vida...—agregó con sincera profundidad.

—¡Ay! que rico~ y si acabamos juntos, ¿hm? —propuso Angel con picardía — ¿en tu cama? —jadeó con entusiasmo mientras se acercaba a él— ¿los dos en lo oscurito? —jadeó nuevamente— podríamos ir por el camino del placer~

—No, ni lo sueñes- —lo interrumpió Angel nuevamente con picardía.

—jadeó— ay anímate guapo~ —intentó convencerlo mientras agarraba las alas de Husk, envolviendose en ellas— apuesto a que puedo hacer que esas alitas vuelen- —Husk lo empujó de vuelta a su asiento con firmeza.

—¡NO! —exclamó, al empujar a Angel hizo caer la botella de whiskey en la barra al suelo— ¡puta madre! ¡deja de insinuarte! no te va a resultar conmigo, solo te ridiculizas con esta pendejada falsa de acto- —Angel lo interrumpió ofendido.

—¡¡LLÁMAME FALSO OTRA VEZ HIJO DE PERRA!! —exclamó furioso, las pecas debajo de sus ojos revelándose como otro conjunto de ojos, brillando con fervor— ¡te lo advierto! —se calló, retando a Husk a que lo llamara falso de nuevo.

—...Falso~... —dijo tocando suavemente el pecho de Angel con su dedo, una sonrisa desafiante en su rostro.

—¡Puto pendejo-! —se estiró enfurecido, golpeándose con el techo del bar, cayendo de espaldas como reflejo.

—¿Terminaste? —bufó Husk mientras lo veía retorcerse del dolor, sentía tristeza por la actitud tan destructiva que Angel había tomado.

—¡No tienes idea! ¡No sabes lo suertudo que eres de que te ofrezca cogerme! —dijo antes de tirar la botella rota de whiskey hacia Husk— ¡soy la perra más cotizada! jajaja —bufó con cierta locura en su voz antes de levantarse del suelo—¡No te imaginas cuántos matarían por recibir mi divino polvo de Angel encima! ¡¡Vete al carajo!! —gritó furioso al señalar a Husk— ¡diviértete siendo un pendejo ermitaño! —vociferó ofendido antes de irse del hotel, empujando a Vaggie en el camino.

—¡Ugh cuidado! ¿Ahora qué? ¡Angel! ¿A dónde vas? —cuestionó confundida.

–¡Me largo! —vociferó antes de cerrar la puerta del hotel detrás de él.