Donde Kim Taehyung es un Alfa adinerado pero esta aburrido de su cómoda vida, simple y monótona necesita encontrar algo que lo motive y Jeon Jungkook es un Omega que vende muffins en un semáforo.
Taehyung encontrara en él la solución a sus problema...
Con el rostro compungido Taehyung no logra entender la actitud del omega y es que a menos que Jungkook tenga pareja que claramente no es asi o que no sienta ninguna atracción por él no encuentra donde esta el error. Aun así, el tiempo que lleva de conocer al omega que bien es relativamente poco sabe que refutar su lógica es mas complicado si detrás de ella existe una razón que él desconoce.
Pero darse por vencido no es su naturaleza.
—Perdoname, ¿ok?, no lo volverá a pasar ...
—Asi es. —Interrumpe Jungkook con el labio entre los dientes y sentado observando sus manos en un acción nerviosa.
Taehyung frunce el ceño porque ese temor que ha sentido con cada arrebato del omega ahora se materializa y parado al pie de la cama con Jungkook al lado del corral solo quisiera poder entender que lo tiene a él tan reacio a todo, pero sobre todo a él.
—¿Qué quieres decir?
—Es mejor que se vaya. —Sin poder mirarlo a la cara Jungkook solo pellizca sus propias manos incredulo que haya permitido que todo esto avanzara a tal punto.
—No hagas esto,¿ok?, te prometo que no volverá a pasar, créeme.
—Usted no entiende.—Jungkook niega con el rostro y sin ánimos de que el otro pueda ver que tan afectado esta solo traga aguantando las ganas de llorar que se le acumulan en los ojos.
—Si me explicaras podría hacerlo, por favor.
No, y Jungkook y su orgullo no le permiten contarle al hombre que tiene al frente como él ya no cree en el amor porque el amor se burlo de él, le mintió y lo dejo en la situación en la que esta y es como si un rayo de luz hubiera dado claridad a sus pensamientos porque ahora que lo piensa mejor no entiende que hace él ahí, un hombre con la clase social que tiene, con la vida que tiene al lado de un omega pobre que viste la misma ropa casi diario, que vende muffins en un semáforo y que no tiene en que caerse muerto por culpa de confiar en ese sentimiento.
—No hay mucho que explicar, solo necesito que se marche señor Kim.
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¿En qué momento todo se desmoronó? -
Se pregunta Kim Taehyung una vez entra en su solitario departamento.
Pero... ¿realmente que había construido?
Nada.
Taehyung con la maleta en el piso igual de frio y vacío que siempre, le duelen muchas cosas entre ellas el no haberse podido despedir de la pequeña, aunque a quien engaña, tal vez era mejor así porque Jungkook fue muy tajante al decirle que no regresara, que toda esta idea había sido mas que absurda desde el principio.
