𝚇𝚅 ࣪い. 𝕵𝒊𝒏𝒆𝒕𝒆 ❜

❛ ✦ . 𝑟𝑒𝑣𝑜𝑙𝑡

┈ 𝐒𝐈𝐆𝐋𝐎 𝐗𝐈𝐗 : 

Carlos se recostó sobre la cama, permitiéndose un momento de vulnerabilidad mientras sus pensamientos vagaban hacia Charles, su amado. La preocupación por su bienestar y el temor a lo desconocido ahora parecían tan lejanos a lo que apenas días era amor puro. Cada risa, cada mirada cómplice, ahora pesaba en su corazón como un recordatorio de lo que podría perder.

El cansancio finalmente venció a Carlos, llevándolo a un sueño inquieto pero profundo. Soñó con el bosque del norte, con sombras que se movían entre los árboles y susurros de voces desconocidas. En su sueño, Charles estaba allí, perdido entre la oscuridad, llamándolo con una voz que resonaba como un eco distante. Carlos intentaba alcanzarlo, pero cada paso parecía llevarlo más lejos, la distancia entre ellos aumentaba con cada momento que pasaba; hasta que ahí estaba, Lewis, "La Sombra", clavando una bala en su cráneo. Carlos despertó sobresaltado, el corazón latiendo desbocado y un sudor frío empapando su frente.

Cuando el primer rayo de luz del amanecer comenzó a filtrarse por la ventana, Carlos se despertó sobresaltado, con el corazón latiendo aceleradamente. Se sentó en la cama, respirando profundamente mientras intentaba disipar los restos de su sueño perturbador. 

Se levantó y se puso las botas, asegurándose de que su equipo estuviera en orden. Con determinación, salió de la pequeña habitación y se dirigió hacia la taberna, donde Max ya lo esperaba. El cazarrecompensas estaba de pie, con su capa oscura ondeando ligeramente en la brisa matutina. Su ojo observaban el horizonte con una intensidad y desinterés.

──── ¿Estás listo? ──── Dijo Max sin preámbulos, observando a Carlos con una mirada evaluadora.

Carlos asintió firmemente. ──── Estoy listo. ¿Cuál es el plan? ────

Max hizo un gesto hacia los límites del pueblo. ──── Primero, seguiremos las pistas que hemos recogido. Hay algunas áreas del bosque del norte que aún no hemos explorado completamente. Necesito que estés alerta y sigas mis instrucciones al pie de la letra. El bosque del norte puede ser traicionero y cada paso cuenta, más si La Sombra está dando sus vueltas como una perra. ────

Con ese acuerdo tácito, los dos hombres montaron sus caballos y se adentraron en el sendero que los llevaría al bosque del norte. A medida que avanzaban, la atmósfera se volvía más densa y opresiva, como si el propio bosque los estuviera observando. La luz del sol se filtraba a través de las hojas. Max lideraba el camino con confianza, moviéndose con una gracia y seguridad. Carlos, por su parte, mantenía sus sentidos alerta, sus ojos escudriñando cada rincón en busca de cualquier pista que pudiera indicar la presencia de Charles.

Después de varias horas de viaje en silencio, Max levantó una mano para detenerse. Se deslizó de su caballo y se agachó para examinar el suelo con cuidado. Carlos siguió su ejemplo, observando cómo Max estudiaba una serie de huellas apenas visibles en el suelo húmedo, pero entonces, algo más llamó su atención: manchas de sangre.

──── Alguien pasó por aquí recientemente. . ──── Murmuró Max, su ojo siguiendo el rastro con precisión. ──── Y no estaban solos. Las huellas sugieren que alguien estaba siendo llevado a la fuerza. ────